PALESTINA: Cómo hacer que Gaza resurja de sus cenizas

La ONU solicita 613 millones de dólares para rescatar a los más de un millón de palestinos que sobrevivieron a tres semanas de bombardeo israelí sobre Gaza, el cual destruyó escuelas, hospitales, viviendas, fábricas y predios agrícolas.

Más de 1.300 palestinos murieron y más de 5.300 resultaron heridos en la guerra, según el Ministerio de Salud palestino. Unas 21.000 casas quedaron inhabitables, y más de 50.000 personas debieron radicarse en refugios temporales de la ONU (Organización de las Naciones Unidas).

"Áreas fabriles enteras fueron completamente arrasadas. Los edificios bombardeados se convirtieron en montañas de escombro", dijo Christine van Neuwenhuyse, directora del Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la ONU para los territorios palestinos ocupados por Israel.

"Algunas áreas no fueron atacadas, pero las destruidas fueron precisamente aquellas estratégicas" para la recuperación económica del territorio, escribió en un informe.

El coordinador de asistencia de emergencia de la ONU para la región, John Holmes, explicó que el pedido de ayuda alcanza sólo para cubrir las necesidades inmediatas y la reparación de infraestructura esencial por un periodo de nueve meses.
[related_articles]
"La reconstrucción de largo plazo es algo diferente que deberá atenderse por separado", agregó.

Se calcula que el costo de la reconstrucción de Gaza asciende a unos 2.000 millones de dólares. Arabia Saudita anunció que aportará la mitad de esa suma. Para recaudar el resto se realizará una conferencia de donantes en El Cairo el 2 de marzo.

Del monto solicitado de manera urgente por la ONU, se destinarán a cubrir la seguridad alimentaria 153 millones de dólares. Para las necesidades de vivienda y de asistencia no alimentaria se gastarán 119 millones.

Además, se utilizarán 30 millones de dólares para rehabilitar la producción agrícola. El director del PMA para Medio Oriente, Asia Central y Europa Oriental, Daly Belgasmi, dijo a la prensa que "la meta no es crear una sociedad de gente asistida, sino más bien una de gente que pueda valerse por sí misma".

Para ello, agregó, es importante brindarles ayuda a los agricultores locales, que deberán comprometerse con el esfuerzo.

Holmes identificó tres factores críticos para el éxito de la campaña de asistencia. "El primero y más obvio es que se estabilice el actual cese del fuego, hoy muy frágil, que debe ser perdurable para instaurar un ambiente razonablemente pacífico en el cual operar", dijo.

"El segundo, también crucial, es un tránsito mucho más libre para los bienes de carácter humanitario y los comerciales, para el personal de asistencia y para la gente en general. Además, se precisa dinero en efectivo, sin el cual una economía no puede funcionar", agregó.

En tercer lugar, Holmes enfatizó en la necesidad de librar a las operaciones de asistencia de las interferencias políticas.

Se requiere, por lo tanto, cooperación de las autoridades israelíes, pues ellas controlan los cruces de frontera. La Autoridad Nacional Palestina, que paga buena parte del sueldo de los funcionarios públicos en Gaza, también debe involucrarse.

Holmes consideró que los trabajadores de asistencia no tendrán ningún inconveniente en dialogar a nivel técnico con miembros del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás, por su acrónimo en árabe), el partido que controla la franja de Gaza.

El complejo esfuerzo de ayuda en el terreno es desarrollado por un centenar de organizaciones no gubernamentales y docenas de agencias y programas de la ONU.

La Unión Europea (UE), organizaciones no gubernamentales, el Banco Mundial "y otros aliados" trabajan "de manera coordinada y sistemática para ayudar a los palestinos a recuperar sus medios de vida, atender los traumas de posguerra, restaurar los servicios e instalaciones civiles básicas, etcétera", dijo a IPS Jens Toyberg-Frandzen, del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).

La fase de "recuperación temprana o reconstrucción transicional", explicó el funcionario, "debería implementarse inmediatamente después de la conferencia de donantes en El Cairo".

Mientras, la situación es difícil. La escasez y el encarecimiento de los alimentos, la falta de gas para cocinar y de combustible para el transporte y la producción de electricidad y las restricciones en el acceso a los predios agrícolas complican la vida cotidiana en Gaza.

"El público debe esperar hasta seis horas haciendo cola para obtener pan", dijo Belgasmi.

El PMA ya distribuyó raciones que alcanzan para dos meses a más de 186.000 palestinos, pero quienes las necesitan ascienden hasta a 365.000.

Hasta ahora se recaudaron unos 80 millones de dólares, 13 por ciento de lo requerido. Los países donantes ya aportaron más de 100 millones de dólares para cubrir otras necesidades, sea en especies o en efectivo.

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe