Cuba y la Comunidad del Caribe (Caricom) revisarán este lunes en Santiago de Cuba el estado de sus relaciones y buscarán perfilar una postura común hacia la primera Cumbre de América Latina y el Caribe, prevista para el 16 y 17 de este mes en Brasil.
A ambas citas tiene previsto asistir el presidente de Cuba, Raúl Castro, quien ha elogiado la reunión convocada bajo el título Integración y Desarrollo en Salvador, capital del nororiental estado de Bahía, como una "importante" ocasión en que caribeños y latinoamericanos conversen sin "tutela" de nadie para enfrentar sus problemas.
El encuentro Cuba-Caricom reunirá a Castro y a los jefes de Estado y de Gobierno de las 15 naciones que integran ese esquema regional del Caribe, según indicó a periodistas el vicecanciller cubano Alejandro González. También estarán presentes altos directivos de otras organizaciones regionales.
En su proyección hacia los demás países caribeños, Cuba concede importancia estratégica a los programas de colaboración que se han incrementado en los últimos años. "Lo trascendente (en los vínculos) es el alto nivel de cooperación que existe y la voluntad política de avanzar y profundizar" en ese sentido, afirmó el viceministro González en días previos a la cita.
Ese tema figura en la agenda de la cumbre, que también se abocará al análisis de la crisis financiera mundial, energética, alimentaria y ambiental y su impacto en los países del Caribe. El programa también incluye delinear la posición de Cuba y de los países de la Caricom de cara a la Cumbre de Bahía, la cual será expuesta en una declaración especial al término del encuentro.
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La reunión de Santiago de Cuba, distante 847 kilómetros de La Habana y considerada la más caribeña de las ciudades de este país, es la tercera desde que se acordó celebrarlas, cada tres años, en fecha coincidente con el aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas de esta nación con Barbados, Guyana, Jamaica y Trinidad Tobago, el 8 de diciembre de 1972.
Pero será la primera que se lleva a cabo sin la presencia del líder cubano Fidel Castro, quien a principios de este año desistió de continuar en sus cargos de Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) y de presidente de los Consejos de Estado y de Ministros. Esas tres funciones son ocupadas desde febrero pasado por su hermano Raúl.
En 2002, Fidel Castro fue anfitrión en La Habana de la primera cumbre Cuba-Caricom, con motivo del 30 aniversario del establecimiento de vínculos con esas cuatro naciones. Tres años más tarde viajó a Bridgetown, Barbados, para participar en la segunda cita de naciones del Caribe.
A su hermano y sucesor corresponderá revisar con sus pares caribeños los acuerdos de las dos cumbres pasadas, analizar los proyectos conjuntos en curso y la identificación de otras iniciativas, según la agenda de esta tercera edición de la Cumbre Cuba-Caricom.
En la actualidad, Cuba mantiene relaciones diplomáticas con los 14 estados independientes de la Caricom, que son Antigua y Barbuda, Bahamas, Barbados, Belice, Dominica, Granada, Guyana, Haití, Jamaica, Montserrat, San Cristóbal y Nevis, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, Surinam y Trinidad y Tobago.
Del bloque también forma parte como miembro pleno la isla de Montserrat, que es un territorio dependiente de Gran Bretaña.
Como asociados están Anguilla, Bermuda, las británicas Islas Vírgenes, Islas Caimán e Islas Turcas y Caicos, mientras que son observadores las Antillas Holandesas, Aruba, Colombia, México, Puerto Rico, República Dominicana y Venezuela.
González descartó la idea de que Cuba ingrese formalmente a la Caricom. "No nos hemos planteado eso y tampoco lo entendemos necesario ( ). Lo trascendente para nosotros es el alto nivel de cooperación existente", con programas que "apuntan a la integración", indicó el viceministro de Relaciones Exteriores.
La colaboración se traduce especialmente en las esferas de la salud, educación y energética. De un total de 1.362 profesionales cubanos que presentan servicios en esa área, 81 por ciento de ellos pertenecen al sector sanitario, en tanto buena parte de los 3.141 jóvenes caribeños que estudian en Cuba se forman en ciencias médicas y enfermería.
Desde 1961 en adelante, las universidades cubanas han graduado 2.813 profesionales de la región caribeña, 815 de ellos en medicina, según datos de la cancillería. La cooperación incluye también la implementación de un programa para el ahorro y uso racional de la energía eléctrica, mediante el suministro de bombillas de bajo consumo, que beneficia a 11 estados miembros de la Caricom.
El intercambio comercial de La Habana con ese bloque regional alcanza en la actualidad unos 95 millones de dólares, unos 30 millones de los cuales corresponden a negocios con Trinidad y Tobago y cerca de 10 millones con Jamaica. Un acuerdo firmado en 2000 entre Cuba y la Caricom libera o reduce el pago de aranceles a determinados productos de importación.
Por otra parte, Cuba y las pequeñas islas caribeñas comparten los riesgos del cambio climático y el impacto de los huracanes, que se han hecho cada vez más intensos. Ese es un tema que "con toda seguridad" estará también presente en las discusiones de la Cumbre, precisó González ante la pregunta de IPS.
La Caricom se creó en 1973 para contribuir a superar los efectos negativos causados por la escasa extensión, el aislamiento geográfico y la dependencia exterior de los pequeños estados que la integran, cuyas economías son altamente vulnerables y orientadas en gran medida hacia el sector de servicios, como el turismo.
El gobierno cubano valora especialmente el apoyo de la Caricom en su demanda internacional de que cese el embargo estadounidense de más de cuatro décadas.
"Estados Unidos no ha podido arrastrar al Caribe a sus políticas contra Cuba ( ) ni impedir las relaciones profundas que existen por encima de "cuestiones ideológicas", consideró González.
