El juicio al ex espía indonesio Muchdi Purwopranjono puede ser otro hito en el camino hacia la justicia en relación al asesinato del activista por los derechos humanos Munir Said Thalib, en 2004.
"Éste es el primer caso en la historia política de Indonesia donde un ex general de alto rango, ex subdirector de la agencia de inteligencia (BIN), es llevado a juicio", dijo telefónicamente a IPS Usman Hamid, director ejecutivo de la Comisión para las Personas Desaparecidas y Víctimas de la Violencia (Kontras), con sede en Yakarta.
Muchdi Purwopranjono, quien ocupaba ese puesto en la BIN al momento de la muerte de Munir y que antes había sido jefe de las fuerzas especiales del ejército Kopassus, es sometido a juicio en Yakarta por cargos de premeditación y orquestación del asesinato.
El activista falleció tras agonizar en un vuelo de la aerolínea indonesia Garuda que iba de Singapur a Amsterdam en septiembre de 2004, tras ser envenenado con arsénico durante una escala en el estado insular.
Munir, entonces de 38 años, viajaba a Holanda para cursar estudios de posgrado.
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Los fiscales alegan que la motivación de Muchdi fue la venganza, ya que el defensor de los derechos humanos fue responsable de su destitución como jefe del Kopassus tras dejar al descubierto sus vínculos con varias desapariciones de activistas a fines de los años 90.
Irónicamente, la destitución de Muchdi del Kopassus en 1998, tras apenas 52 días al mando de esas fuerzas especiales, le permitió integrarse a la BIN en 2003, donde tuvo la oportunidad tomar por blanco a Munir.
El juicio de Muchdi, que comenzó el 21 de este mes, es apenas el último acontecimiento vinculado al asesinato de Munir.
En 2005, Pollycarpus Priyanto, ex piloto de la aerolínea Garuda Indonesia, fue hallado culpable y sentenciado a 14 años de prisión por envenenar a Munir mientras se encontraba en el Aeropuerto Changi de Singapur.
Esa sentencia fue posteriormente revocada en 2006, sólo para que Pollycarpus volviera a ser hallado culpable, en enero de este año, tras una evaluación judicial, cuando se le condenó a 20 años de cárcel.
Pero el asesinato de Munir sigue siendo un asunto actual y controvertido en Indonesia. Su viuda, Suciwati, exigió que se investigara a "la gente de Inteligencia que está detrás" de Pollycarpus, tras el veredicto de culpabilidad del ex piloto.
Además, un ex jefe de Garuda fue sentenciado a un año tras las rejas en febrero, por su rol en la muerte de Munir.
Indra Setiawan, presidente de la aerolínea nacional de Indonesia cuando Munir fue asesinado, dijo durante su juicio que aunque no sabía nada del plan para matar al activista, sí emitió una carta que autorizó a Pollycarpus a viajar en el mismo vuelo que Munir como "encargado de seguridad".
Indra sostuvo que esa carta sólo fue extendida a pedido de otro ex alto funcionario de la BIN, Mohammad Asad.
Mientras se espera que Asad comparezca como testigo en el juicio en curso —cuyo abogado dice que ve los procedimientos judiciales como una oportunidad de demostrar su inocencia— será condenado a la pena de muerte si es hallado culpable.
Usman Hamid señaló que los activistas por los derechos humanos están complacidos de ver a Muchdi sometido a juicio. "Pienso que todos nosotros damos la bienvenida a los actuales procedimientos legales sobre Muchdi", dijo Usman a IPS.
Sin embargo, el director ejecutivo de Kontras sostuvo que aún es demasiado pronto para concluir que llevar a tribunales a una figura poderosa como Muchdi, incluso por cargos serios, marca un apartamiento de la evidente impunidad para funcionarios de alto rango que existió en Indonesia cuando estaba en el poder el dictador Alí Suharto (1967-1998).
"Se necesita más acción del gobierno, de las agencias de aplicación de la ley, para asegurar que el juicio de Muchdi sea un símbolo de todo un cambio en Indonesia", dijo Usman.
También sostuvo que ese simbolismo requeriría que todos quienes estuvieron involucrados en la muerte de Munir, entre ellos otros individuos de alto rango, fueran llevados a la justicia.
"Pienso que una de las personas más importantes que tienen que ser llevadas a juicio es el ex jefe de la agencia de inteligencia, (Abdullah Mahmud) Hendropriyono", dijo Usman a IPS.
Hendropriyono fue jefe de la BIN entre 2001 y 2004, periodo durante el cual ocurrió el asesinato de Munir. Usman dijo que la Kontras continuará presionando para la policía lo investigue.
"Desafortunadamente, hasta ahora no hemos visto u oído que él haya estado bajo investigación policial", señaló Usman.