La cumbre africana se propone impulsar un acuerdo para poner fin a la violencia política en Zimbabwe, que golpeó especialmente a las mujeres. El presidente Robert Mugabe llegó este lunes a la ciudad egipcia de Sharm el-Sheikh, sede de la conferencia.
Aún está por verse qué tipo de acuerdo deberá promoverse para hacer frente a la injusticia y al dolor que padecen los zimbabwenses, cuyo presidente prestó juramento el domingo para un nuevo periodo de gobierno.
"Ya nos hemos acostumbrado a la violencia que padecemos desde 1890, cuando llegaron los colonialistas (europeos), y que se ha prolongado hasta las últimas elecciones", advirtió antes de la segunda ronda de las elecciones presidenciales el Proyecto de Educación Política Feminista (FePEP, por sus siglas en inglés).
Esta organización destacó, en esta declaración emitida en abril, "la violencia sexual y sus implicancias concomitantes", entre las que mencionó la propagación del virus de inmunodeficiencia humana (VIH), causante del sida.
"Las zimbabwenses tienen la menor esperanza de vida del mundo a causa del sida: 34 años", redundó.
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La declaración de FePEP, organización dedicada a promover la participación de las mujeres, fue divulgada cuando este país aguardaba la divulgación de los resultados, demorados sin justificación aparente, de la primera ronda electoral del 29 de marzo.
Tras ganar los comicios presidenciales con un margen insuficiente para triunfar en primera vuelta, el líder opositor Moran Tsvangirai era considerado favorito para la segunda ronda.
Dada la violencia reinante, su Movimiento por un Cambio Democrático (MDC, por sus siglas en inglés) decidió la semana pasada retirarse de la segunda vuelta de los comicios.
FePEP consideraba entonces que, independientemente de quién ganaría las elecciones, ni Tsvangirai ni Mugabe serían capaces de unir a todas las facciones por el bien del país.
Una de las coordinadoras de FePEP, Priscilla Misihairabwi-Mushonga, también ex legisladora del MDC, dijo a IPS que Tsvangirai "hizo lo que tenía que hacer, aunque demasiado tarde" el 22 de este mes, cuando decidió abandonar la carrera.
"Nuestra postura ha sido consistente. Los actuales problemas de Zimbabwe no pueden resolverse mediante una elección", señaló Misihairabwi-Mushonga.
"Nuestra sociedad está partida al medio y cualquier gobierno tendrá que ser, por naturaleza, inclusivo si queremos realmente salir del impasse actual. Los problemas de este país no se resolverán. Tenemos que seguir presionando para lograr un diálogo", añadió.
En tanto Mugabe, de 84 años, fue investido otra vez presidente el domingo, los zimbabwenses siguen evaluando el costo de la campaña brutal de la gobernante Unión Nacional Africana – Frente Patriótico (ZANU-PF) a fin de mantenerse en el poder.
Mugabe fue primer ministro de Zimbabwe de 1980 a 1987 y presidente desde entonces.
"Las mujeres son las que más sufren la violencia", señaló Netsai Mushonga, coordinadora de la Coalición de Mujeres de Zimbabwe, que reúne a muchas organizaciones femeninas.
"Por la información que hemos recabado, suponemos que la cantidad de casos de violación se triplicará. Todavía tenemos que sentarnos a hacer un análisis detallado de la situación", apuntó.
La mayoría de los partidarios de la oposición huyeron de las áreas rurales y dejaron a las mujeres en situación de gran vulnerabilidad, señaló Alouis Chaumba, portavoz de Zimbabwe Peace Project, organización que documenta casos de violencia política.
"Grupos armados de ZANU-PF suelen secuestrar a mujeres y niños para obligar a los hombres a regresar. Hay gran cantidad de casos en que se los llevan para pedir rescate y son detenidos en bases hasta que sus padres o maridos regresan a sus aldeas. A las mujeres se las agrede, tortura y viola", relató Chaumba.
Una joven de 29 años que pidió reserva de su identidad y prefirió ser citada como Martha Marime, de la aldea de Chaona, en la provincia de Mashonaland Central, relató que fue secuestrada a fines de mayo y violada por hombres de ZANU-PF durante horas.
"Creo que nunca me recuperaré del dolor y la vergüenza. Me obligaron a hacer cosas que nunca había hecho en mi vida y me duele mucho pensar en eso. Me violaron por turnos y luego me golpearon diciéndome que era una prostituta. Tenía dos meses de embarazo. Lo perdí el día en que me liberaron", relató Marime.
Una dirigente de una importante organización de mujeres, que también pidió reserva de su identidad, indicó que las mujeres eran hostigadas sólo por sospechar que sus esposos, hijos u otros familiares varones simpatizaban con la oposición.
"Aún estamos reuniendo información, pero nos llegó, por ejemplo, el caso de Abigail Chiroto, secuestrada y asesinada de modo horripilante, frente a su hijo de cuatro años, porque su marido era dirigente de MDC", indicó.
"Las mujeres la pasan muy mal, pero la mayoría de ellas evitan denunciar por miedo a las represalias", añadió la activista.
Abigail Chiroto, esposa del alcalde electo de Harare, Emmanuel Chiroto, fue secuestrada de su casa del barrio capitalino de Hatcliffe, y encontrada muerta en una granja a las afueras de esta ciudad. Su hijo resultó ileso.
Algunas candidatas también sufrieron la violencia reinante.
Trudy Stevenson, de la facción del MDC liderada por Arthur Mutambara, que no resultó elegida el domingo, vive clandestina desde hace semanas tras repetidos atentados contra su vivienda perpetrados por presuntos partidarios del ZANU-PF.
"Estoy en un lugar seguro, pero obviamente me preocupa que en cualquier momento lo ataquen, en este marco de secuestros, torturas y asesinatos y cóctel molotov contra viviendas. Muchos compañeros tampoco se sienten seguros", declaró Stevenson.
Theresa Makone, legisladora electa por el distrito de Harare Septentrional y presidenta de la Liga de Mujeres del MDC, vive clandestina desde hace casi un mes. Su chofer, Beta Chokururama, fue asesinado el 13 por presuntos partidarios de ZANU-PF.
El ministro de Justicia, Patrick Chinamasa, negó que su partido fuera responsable del terror que se instaló tras los comicios del 29 de marzo.
"La oposición hace todo tipo de acusaciones para llamar la atención de forma innecesaria por razones que desconocemos. Según nos informó la policía, partidarios del MDC perpetran actos violentos contra nuestra gente, nos roban material de la campaña y se disfrazan como integrantes de nuestro partido", señaló Chinamasa, quien también preside una comisión de prensa del ZANU-PF para las elecciones.
Respecto de las violaciones perpetradas en bases del ZANU-PF, Chinamasa sólo declaró que su partido "no tiene tales bases".
Sin demoras, el longevo presidente Mugabe viajó a Egipto con motivo de la cumbre de la Unión Africana, que concluirá este martes y en la que participan líderes africanos que han criticado lo sucedido en Zimbabwe.
Entre ellos, el presidente de Zambia, Levy Mwanawasa, presidente de la Comunidad de Desarrollo de África Austral (SADC), quien declaró que las elecciones no respetaron los estándares de legitimidad.
***** +Unión Africana (http://www.africa-union.org/) +El show debe continuar (https://www.ipsnoticias.net/nota.asp?idnews=88883)