Las Fuerzas Armadas de Perú iniciaron un amplio despliegue ofensivo contra la más combativa columna remanente del maoísta Sendero Luminoso, que opera en el valle de los ríos Ene y Apurimac, zona selvática del sudeste donde se concentra la mayor producción de coca y cocaína.
Por disposición del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas se desplazaron 5.000 efectivos de las brigadas 2 y 31 de infantería del ejército, así como 200 miembros de las Fuerzas de Operaciones Especiales y de la infantería de marina, y 200 más de la Unidad de Defensa y Operaciones Especiales de la fuerza aérea.
El enemigo al que se enfrentan es de sólo 200 combatientes.
Aparte del envío de la numerosa tropa, el Comando Conjunto ordenó la disposición de dos helicópteros artillados Mi-25 y Mi-17, aviones de reconocimiento y la instalación de una base fluvial con dos patrullas.
"Nunca antes se había concentrado en el valle de los ríos Apurimac y Ene (VRAE) tan numeroso y especializado personal para combatir a los senderistas", dijeron a IPS fuentes del Comando Conjunto.
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Los operativos son dirigidos por el Destacamento Especial del VRAE, cuya sede está en la localidad cusqueña de Pichari, al mando del general Raymundo Flores Cárdenas.
"El objetivo es desactivar a la columna de 200 hombres fuertemente armados que dirige el llamado camarada 'José', un senderista con amplia experiencia de combate y profundo conocimiento de la zona", indicaron las fuentes militares.
El camarada "José", cuyo verdadero nombre es Víctor Quispe, de 49 años, es un viejo militante de Sendero Luminoso que se sumó a esa guerrilla cuando era estudiante de antropología en la Universidad Nacional San Cristóbal de Huamanga.
En ese claustro de la capital de la región surandina de Ayacucho, el profesor de filosofía Abimael Guzmán gestó la lucha armada de inspiración maoísta que se inició el 17 de mayo de 1980, desatando una guerra civil que costaría unos 69.000 muertos hasta 2000.
El 12 de septiembre de 1992, la policía capturó en Lima a Guzmán y a casi todos los integrantes del Comité Central del Partido Comunista del Perú-Sendero Luminoso. En octubre del año siguiente, Guzmán y demás dirigentes detenidos suscribieron un acuerdo de paz con el gobierno de Alberto Fujimori (1990-2000).
Pero los líderes del Comité Regional del Centro, que opera en el VRAE, y el Comité Regional del Huallaga, que actúa en el valle selvático del río homónimo, no aceptaron esa negociación ni su resultado y continuaron con lo que llamaban "guerra popular".
Óscar Ramírez, uno de los fundadores de Sendero, conocido como camarada "Feliciano", dirigía el Comité Regional del Centro.
El 14 de julio de 1999, "Feliciano" fue detenido en un operativo militar, y lo reemplazó su brazo derecho, Quispe.
Poco después, Quispe demostró su pericia militar y su conocimiento de la zona: el 2 de octubre, dispuso una emboscada contra un helicóptero Mi-17, matando a cinco soldados.
Quispe se erigió como el dirigente más notorio de los senderistas que optaron por permanecer alzados en armas. El crecimiento de los cultivos de coca y de la producción de cocaína en el VRAE contribuyó a consolidar esa presencia, según diversas fuentes.
Quispe anunció en una proclama el inicio de la "tercera etapa de la guerra popular", tras la primera dirigida por Guzmán (1980-1992) y la segunda a cargo de Ramírez (1992-1999).
"Para expandirse, Víctor Quispe aprovechó la resistencia de los campesinos cocaleros contra las erradicaciones forzadas de los cultivos de coca", dijo una fuente de la Dirección Nacional contra el Terrorismo, conocida como policía antiterrorista.
"Los senderistas emboscan a militares y policías y les dicen a los campesinos: 'Nosotros defendemos sus intereses, somos su ejército popular, no los vamos a matar'. Dicen que han cambiado de estrategia, porque cuando Abimael Guzmán dirigía la guerra, mataban a los campesinos que se oponían a los senderistas", agregó.
Según el informe de 2007 de la Oficina de las Naciones contra la Droga y el Delito (UNODC), la producción de cocaína pasó de 141 toneladas en 2000 a 280 toneladas en 2006, un crecimiento de 50,3 por ciento.
Según las fuentes militares, los senderistas "son ahora parte del proceso de producción de cocaína. Son narcotraficantes".
Un reporte de inteligencia de la División de Investigación y Control de Insumos de la Dirección Nacional Antidrogas señala que en operativos de incautación de vehículos transportando productos para la elaboración de cocaína, fueron capturados miembros buscados de Sendero.
"Los senderistas obtienen mucho dinero desde que son parte de la cadena de producción de cocaína", dijo a IPS un oficial de la División de Investigación.
"No sólo actúan como el ejército particular de los narcotraficantes, sino que son parte misma de la red porque producen cocaína pura y la comercializan. Con esos fondos financian su guerra", agregó.
Dos hermanos de Quispe, Jorge e Iván, son parte de la dirección de Sendero. La familia Quispe es de Umaru, Ayacucho, principal teatro de las acciones senderistas.
Según la información de las autoridades, la modalidad de actuación de los insurgentes es la emboscada de patrullas de la policía que se desplazan por la zona.
El 23 de marzo, presuntos senderistas balearon dos camionetas policiales en Quinua, muy cerca de Huamanga. Una policía murió y otros 13 fueron heridos. Los agresores se llevaron 14 fusiles Kalashnikov.
Un reporte de la Dirección General de Inteligencia del Ministerio del Interior, al que tuvo acceso IPS, indica que Quispe ha organizado una "red de apoyo" en Lima.
"La solución no es militar. No sólo se necesitan columnas de hombres armados sino también columnas de profesores, médicos, constructores, agrotécnicos" para abatir la violencia en esas zonas muy pobres, reconocieron las fuentes del Comando Conjunto. "La pobreza no se elimina a balazos".
Según esas fuentes, se encuentra en ejecución la primera fase de la estrategia contra Sendero y para antes de fin de año esperan resultados sobre el destino de Quispe, quien el 17 de mayo cumplirá 28 años de combate contra el Estado peruano.
