Acabar con el continuo subfinanciamiento de las actividades femeninas dentro de la ONU será una de las prioridades en la agenda de la sesión que la Comisión sobre el Estatus de las Mujeres iniciará el próximo lunes.
El tema central de esa sesión, que se celebrará entre el 25 de este mes y el 7 de marzo, es "Financiamiento para la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres".
"Creemos que es imposible debatir sobre el financiamiento de la igualdad de género sin discutir los mecanismos estructurales dentro del sistema de la ONU (Organización de las Naciones Unidas) a fin de distribuir los recursos necesarios para mejorar las vidas de las mujeres", dijo June Zeitlin, directora ejecutiva de la Organización de las Mujeres para el Ambiente y el Desarrollo.
"Sin una entidad femenina más fuerte y consolidada liderada por una subsecretaria general y financiada de modo ambicioso, el tipo de cambio estructural que las organizaciones de mujeres defendieron durante los últimos dos años, y los esfuerzos hechos por gobiernos y agencias internacionales de desarrollo no serán suficientes", declaró Zeitlin a IPS.
Todo el presupuesto 2006 de la única entidad femenina operativa (el Fondo de Desarrollo de las Naciones Unidas para la Mujer, Unifem) fue de apenas 57 millones de dólares, alrededor de dos por ciento del presupuesto de 2.340 millones del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) para el mismo periodo, señaló la Liga Internacional de Mujeres por la Paz y la Libertad.
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Los presupuestos combinados de todas las entidades femeninas de la ONU —entre ellas la División para el Avance de las Mujeres, la Oficina del Asesor Especial sobre Asuntos de Género y el Instituto Internacional de Investigaciones y Capacitación de las Naciones Unidas para la Promoción de la Mujer— totalizaron apenas alrededor de 65 millones de dólares en 2006, según la Liga Internacional de Mujeres por la Paz y la Libertad.
"Esto es 0,005 por ciento del gasto militar mundial de 1,2 billones de dólares en 2006", señaló la Liga, en su presentación escrita ante la Comisión sobre el Estatus de las Mujeres.
Sin embargo, en 2007, el presupuesto de Unifem se duplicó, para alcanzar alrededor de 115 millones de dólares. Pero su nivel de financiamiento se mantuvo muy por detrás de la mayoría de los organismos y agencias de la ONU.
La Liga también encuentra "inaceptable que pese a muchos compromisos con la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres, las cifras hablen de una historia diferente".
Una propuesta de una nueva agencia femenina de la ONU —que será presidida por un subsecretario general— permanece en el limbo, pese al apoyo del secretario general Ban Ki-moon.
La propuesta puede ser una realidad solamente cuando es aprobada por la Asamblea General, de 192 miembros. Pero los estados miembro le dan largas al asunto, ya sea por razones políticas o financieras.
Jessica Neuwirth, presidenta de Equality Now (Igualdad Ahora), una organización internacional de derechos humanos, dijo que el financiamiento para las mujeres, y particularmente para la defensa de sus derechos, "es desproporcionadamente bajo".
Tanto en el sector de las organizaciones no gubernamentales como en la propia ONU, el financiamiento para las mujeres es exponencialmente más bajo que para otros asuntos, agregó.
Por ejemplo, Unicef tiene un presupuesto de cientos de millones, mientras que el de Unifem es de decenas de millones, observó.
"Durante mucho tiempo se reconoció que invertir en las mujeres genera altos réditos en materia de desarrollo, paz y otros. Pero nadie está invirtiendo realmente en las mujeres. Es tiempo de hacer coincidir la retórica con el financiamiento", dijo Neuwirth a IPS.
Según Zeitlin, el informe del secretario general ante la CSW dice que es difícil rastrear los recursos asignados a la igualdad de género y al empoderamiento de las mujeres dentro del sistema de la ONU, tanto en el ámbito nacional como regional.
El informe de Ban también destaca que las recientes discusiones sobre la reforma de los arreglos institucionales para la igualdad de género en la ONU revelaron un serio sub-financiamiento de los organismos dedicados específicamente a asuntos de género.
"Esto es una subestimación", expresó Zeitlin, particularmente cuando el presupuesto de Unifem se compara con los de otras agencias de la ONU.
Por ejemplo, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) dispone de 3.500 millones de dólares.
"No es necesario ser un genio matemático para darse cuenta de que la cantidad de dinero dedicada a las entidades de la ONU específicamente encargadas de promover la igualdad de género y la potenciación de las mujeres (no) es meramente un 'error de redondeo'", dijo Zeitlin a IPS.
Hablando el mes pasado en un seminario sobre el financiamiento de la igualdad de género, Marina Fe B. Durano, de Unifem, dijo que el género como tema que afecta a otros varios asuntos debería dejar de ser conceptual o incluso efímero y llevar a las mujeres más cerca de las realidades.
"Necesitamos conectar las demandas de las mujeres con políticas, programas y mecanismos de implementación", dijo Durano.
Tiene poco valor estar en la mesa de negociaciones cuando el entorno externo gobernado por las instituciones mundiales limita las opciones políticas disponibles para las mujeres, explicó.
Durano señaló que muchas de las políticas cubiertas por el financiamiento para el desarrollo se hallan detalladas en los acuerdos negociados en la Organización Mundial del Comercio y otros acuerdos comerciales regionales. También en los de préstamos negociados con el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI) y en instrumentos de asistencia de agencias de cooperación bilateral al desarrollo.
"Esto aparece bajo la forma de condiciones que nuestros respectivos gobiernos han cuestionado. Incluso la igualdad de género se volvió rehén de esta mentalidad", agregó Durano.
La gobernanza económica mundial debe ser tal que "esté garantizada nuestra libertad colectiva de expresión política", agregó.
"¿Qué significa estar en la mesa (de negociaciones) cuando las agencias externas han decidido en nuestro nombre qué es bueno y qué no para nosotros?", preguntó.