La Organización de las Naciones Unidas (ONU), que ya ha expresado su preocupación por la seguridad de su personal en Argelia y Sudán, debe ahora hacer frente a dos nuevas zonas de riesgo: Chad y Kenia.
Como consecuencia de la creciente violencia en ambos países, el foro mundial analiza una vez más el tema de la seguridad de su personal casi ocho semanas después del atentado en Argelia, en el que murieron 17 integrantes de su representación en ese país.
"Estoy alarmado por el deterioro de la situación en la capital de Chad, N'Djamena, y en otros lugares", dijo el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon.
"Ya no podemos garantizar la seguridad del personal de la ONU en Chad y hemos evacuado a la mayoría, con la ayuda del gobierno francés, a Camerún y Gabón", agregó.
El pequeño número que aún permanece en el país también será retirado si la situación política y militar se deteriora, dijo Ban.
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El fin de semana pasado, insurgentes atacaron N'Djamena en un intento de derrocar al presidente Idriss Deby, quien ha estado en el poder por casi 17 años.
Aunque se señala que los rebeldes cuentan con el apoyo de Sudán, el gobierno de ese país lo ha negado.
"Los últimos episodios en Argelia, Chad, Kenia y en la región de Darfur en Sudán no hacen más que subrayar la urgencia de esta cuestión", señaló Ban.
En las próximas semanas, agregó, pedirá a los 192 Estados miembro que refuercen la seguridad del personal de la ONU en sus países.
El director del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, Kemal Dervis, cuya oficina fue destruida en el atentado de Argel, dijo en enero que en por lo menos seis naciones el personal de la ONU recibió instrucciones de trabajar en sus casas, porque los edificios de la organización se habían vuelto un blanco de grupos terroristas.
Las amenazas contra personal de la ONU han estado dirigidas a funcionarios y miembros de las misiones de paz en países como Afganistán, Iraq, Líbano y Somalia.
Ban también anunció el establecimiento de una comisión independiente para analizar el tema de la seguridad del personal y edificios de la ONU en todo el mundo, que estará presidida por el ex asesor especial del organismo mundial, el argelino Lakhdar Brahimi.
Cuando Ban informó de sus planes para crear esa comisión, el mes pasado, el gobierno de Argelia manifestó su malestar, fundamentalmente por razones políticas. También negó las acusaciones de haber ignorado un pedido para reforzar la seguridad de las oficinas de la ONU, formulado antes del atentado.
Los periodistas le preguntaron a Ban si la designación de Brahimi, ex ministro de Relaciones Exteriores de Argelia, buscaba "apaciguar" a las autoridades de ese país. "Consultamos al gobierno y creemos que será la persona apropiada para presidir esa comisión independiente", respondió.
"Estoy seguro que todos coinciden respecto de su integridad. Aunque es argelino, es más conocido como un líder cosmopolita", agregó.
En cuanto a Kenia, Ban señaló que había advertido a la Unión Africana que "los enfrentamientos étnicos amenazan con escalar fuera de control".
El secretario general de la ONU comentó que había pedido al Consejo de Seguridad que actuara con rapidez para ayudar a poner fin a la crisis en Chad, que no sólo pone en peligro a la población de ese país sino también a los refugiados de la occidental región sudanesa de Darfur que buscaron refugio allí.
"La inseguridad en Darfur restringe severamente la ayuda humanitaria a los civiles que la necesitan", dijo Ban.
La fuerza de paz en la región, advirtió, necesita helicópteros y tropas adicionales. "Los países que reclamaron una intervención en Darfur tienen una especial obligación para cumplir sus promesas", señaló Ban.
El gobierno de Sudán, que exige que la fuerza de paz esté compuesta por tropas exclusivamente africanas, rechazó la presencia de soldados de Nepal, Noruega, Suecia y Tailandia. Hasta ahora sólo se han desplegado 9.000 de los 26.000 hombres previstos originalmente.
"Trataremos de enviar primero tropas africanas de países como Egipto y Etiopía. Luego intentaremos desplegar soldados nepaleses y tailandeses", dijo Ban.