Luego de tres horas de reunión con el gobierno y la cúpula militar, el fiscal general de Colombia, Mario Iguarán, declaró que «existe una coincidencia absoluta» entre el ADN mitocondrial de un niño en manos del Estado y el de Clara González de Rojas, madre de la rehén Clara Rojas.
El gobierno colombiano negó a Caracas acceso directo al niño para que un equipo científico designado por el gobierno venezolano tome las muestras del chico, que permanece en un orfanato en Bogotá, según aseguró el propio presidente Álvaro Uribe.
Las pruebas de ADN tomadas por Colombia serán enviadas al Instituto de Medicina Legal San Francisco, en Santiago de Compostela, España, para que ratifique la comparación mitocondrial, herencia genética que muestra inequívocamente la pertenencia a una familia por línea materna.
El director de ese instituto, Ángel Carracedo, adujo compromisos profesionales de discreción al negarse a dar detalles al respecto, y sólo confirmó que su laboratorio sí hará una revisión de las muestras genéticas.
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En medio de la expectativa mundial por el anuncio de las FARC de que liberaría a Clara Rojas, ex candidata a la vicepresidencia de Colombia, a su hijo Emmanuel, y a la ex parlamentaria Consuelo González, el presidente Uribe lanzó el 31 de diciembre como "hipótesis" que la demora de la guerrilla en entregar a los tres rehenes se debía a que el niño no estaba en su poder.
El anuncio llevó a la crisis de la humanitaria "Operación Emmanuel", como la llamó el gobierno venezolano de Hugo Chávez, que la coordinó.
La frustrada misión pretendía recibir de las izquierdistas FARC a las tres personas con la coordinación operativa del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y con el aval de otros siete países, encabezados por Argentina, Brasil y Francia. "Quedarían muy mal las FARC" si la versión se confirmaba, había dicho previamente el presidente Chávez, quien con el aval de Uribe obró entre el 16 de agosto y el 21 de noviembre como mediador para un acuerdo humanitario mediante el cual esta fuerza insurgente pretende obtener la libertad de medio millar de guerrilleros presos a cambio de rehenes en su poder.
Las FARC, que hasta el medio día de este viernes, hora local, guardaba silencio, mantiene cautivos entre 45 y 50 personas, la mayoría combatientes de las fuerzas de seguridad del Estado, pero también a civiles, entre ellos a la ex candidata presidencial de nacionalidad colombo-francesa Ingrid Betancourt, de la cual Rojas era su compañera de fórmula.
Carlos Lozano, periodista y director del semanario Voz, del Partido Comunista colombiano, y experto en temas del acuerdo humanitario, anotó que la posible aparición de Emmanuel lejos del poder de las FARC ha hecho que se olvide lo principal: la liberación unilateral de las dos mujeres, con quienes se suponía estaba el niño.
Así, con la hipótesis lanzada por Uribe sobre la identidad del menor en el orfanato, "efectivamente, como dijo el presidente Chávez, se dinamitó la operación" de rescate humanitario, comentó Lozano a IPS.
También consideró "irregular" el hecho de que el fiscal Iguarán se haya reunido previamente al anuncio (dado a las 16:30 hora GMT) con el ministro de Defensa, Juan Manuel Santos, y con otros miembros del gabinete del gobierno derechista de Uribe, así como con altos mandos militares, en la septentrional ciudad de Santa Marta, sobre la costa del mar Caribe.
En su opinión, "el fiscal no tenía que discutir el dictamen con nadie. Me da la impresión de que hubo presión del gobierno para que él terminara diciendo lo que dijo", agregó.
Antes de asumir como fiscal, Iguarán fue viceministro de Justicia durante el primer mandato de Uribe (2002-2006).
"No quiero decir que Emmanuel no sea el niño. Puede serlo. Y mientras las FARC no digan nada, es muy difícil" tener un panorama más claro, señaló Lozano.
También confirmó que no se conoce aún cuál es la zona de Colombia donde las FARC tenían previsto entregar a las dos mujeres y, supuestamente, al chico Emmanuel.
El presidente Uribe asumió que esa entrega iba a darse en el sudoriente del país, y luego precisó que en los selváticos departamentos de Guaviare o Vaupés, "pero yo no sé de dónde sacan ellos (el gobierno) eso", anotó Lozano.
"Las FARC no iban a entregar a nadie cerca de donde están los demás secuestrados. Justamente ese era el problema", llevarlos a largas distancias para entregarlos a la comisión humanitaria internacional liderada por Venezuela.
Según Lozano, la versión de Bogotá sobre esos dos departamentos habría surgido porque el niño abandonado y en manos del Estado proviene del Guaviare.
"Con mi hermana liberada", dijo en todo caso desde Caracas Iván Rojas, hermano de Clara, "podríamos cerrar el tema", porque se haría un examen directo entre el ADN de ésta y del supuesto Emmanuel, teniendo al niño al frente.
Otros familiares de rehenes civiles y de los militares y policías sujetos a canje por las FARC enviaron el jueves una carta a los jefes de Estado de Colombia y de los involucrados en la "Operación Emmanuel", Argentina, Bolivia, Brasil, Cuba, Ecuador, Francia, Suiza y Venezuela.
En la misiva piden que se conforme "una comisión internacional que realice las pruebas necesarias para determinar la identidad del niño", y mencionan como antecedente una misión neutral forense que operó para "el reconocimiento de los cadáveres de los 11 diputados asesinados por las FARC-EP" en junio pasado, en confusos hechos militares.
Por otra parte, el ejército colombiano informó que el 31 de diciembre sus tropas dieron "muerte en combate, tras intensos combates", a un "emisario y hombre de confianza del secretariado de las FARC", cúpula de esa insurgencia que anunció la orden de entrega a Chávez de las dos rehenes y de Emmanuel.
Arauca es fronterizo con el estado venezolano de Apure, donde está Guasdualito, uno de los puntos que el presidente Chávez dispuso para recibir a las tres personas que serían liberadas.
El parte de guerra da cuenta de que al insurgente se le hallaron, además de material de guerra, "documentos de interés para la inteligencia militar".
