Representantes ministeriales, de comunidades autónomas, de la cooperación internacional y de organizaciones no gubernamentales de España coordinan desde este viernes sus acciones de ayuda a Perú, afectado por un devastador terremoto. Ya partieron cooperantes con equipo y dinero.
La secretaria de Estado de Cooperación Internacional de España, Leire Pajín, quien interrumpió sus vacaciones inmediatamente de enterarse del sismo, puso énfasis en que la ayuda debe llegar a destino rápidamente y con eficacia, dando prioridad a las necesidades sanitarias de la población y al envío de equipos de rescate, que ya se había dispuesto el jueves.
Pajín, además de presidir la reunión de coordinación, también encabezó junto al embajador de Perú en España, Luis Pérez Sánchez-Cerro, un acto en la Casa de América, "transformada hoy en la casa de Perú", como manifestó.
En el encuentro al que asistieron representantes de asociaciones de inmigrantes, del gobierno de la Comunidad y del Ayuntamiento de Madrid se guardó un minuto de silencio en homenaje a las víctimas del terremoto de 7 grados en la escala de Richter que sacudió casi todo Perú y que dejó más de 500 personas muertas y alrededor de 1.500 heridas, según últimas cifras oficiales.
La funcionaria se mostró, en declaraciones a IPS, complacida porque la asistencia a esas reuniones "desbordó todas las expectativas". Estuvieron representadas las 17 Comunidades Autónomas que integran España, todos los departamentos gubernamentales y casi todas las organizaciones de la sociedad civil, informó.
Ha sido una respuesta contundente, solidaria e inmediata y hemos acordado actuar conjuntamente y designar a la AECI para que coordine las actividades.
Entre la cantidad de entidades estatales y no gubernamentales que reaccionaron solidariamente se destaca Cáritas Española, de la Iglesia Católica, que ya remitió 100.000 euros (unos 130.000 dólares) a su similar en Perú, cuyos equipos se encuentran desde el jueves en las ciudades de Ica, Chincha y Pisco, las más afectadas por el sismo cuyo epicentro se ubicó en el océano Pacífico próximo a las cosas del sur de ese país.
El director de Cáritas Española, José Luis Pérez Larios, también señaló a IPS que lo sorprendente de la reunión fue la alta y variada concurrencia, "ya que estamos en pleno agosto (vacaciones en España)" y "la diversidad de ofrecimientos, tanto en equipos, dinero y personal especializado".
Este viernes partió un avión con 100 toneladas de materiales de ayuda y una docena de personas especializadas y está previsto que mañana parta otro con 50 toneladas y un centenar de personas, todo ello coordinado por la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI).
Además, informó Pajín a IPS, "ya han partido y seguirán partiendo expertos y cooperantes en vuelos regulares".
"Esta rápida y masiva respuesta se debe mantener para ayudar a superar la situación creada por el sismo y después debemos coordinar acciones para que si se produjera algún nuevo sismo en el futuro, las poblaciones humildes no vuelvan a ser las más afectadas", subrayó Pérez Larios.
"Quienes hemos estado allí antes de esta tragedia hemos visto a la mayoría de la población viviendo en casas de adobe, sin cimientos, frágiles. Por eso, mirando hacia delante, tenemos que apoyar que tengan viviendas de mejor calidad y, sobre todo, impulsar el desarrollo de la sociedad. Éste es el gran reto", concluyó el cooperante.
Otra organización que envió inmediata ayuda es Intermón Oxfam, que despachó materiales médicos y un equipo de cinco cooperantes a Pisco y Chincha. Los cooperantes que ya están en Perú evaluarán la situación e informarán a su central en Madrid qué tipo de ayuda es la que con mayor urgencia necesitan las poblaciones afectadas.
Bomberos sin Fronteras, una organización que realiza muchas acciones en el exterior, envió a 17 de sus miembros, entre ellos a un enfermero, un médico y 10 especialistas en rescate, éstos llevando cuatro perros guía para buscar heridos entre los escombros y 1.000 kilogramos de materiales para trabajar en esas tareas.
El "padre Ángel", como se conoce al sacerdote Ángel García, presidente de la no gubernamental Mensajeros de la Paz, se encontraba en El Salvador y al tener noticias del sismo resolvió trasladarse a Lima, donde esa institución tiene un centro para menores, una residencia de día de ancianos y otros hogares solidarios. Allí coordinará la acción del grupo.
Más allá de la ayuda que se está prestando y la que se prestará para enfrentar los daños producidos por el terremoto, tanto los funcionarios públicos ocupados de la cooperación internacional como las organizaciones no gubernamentales, coinciden en que se deben redoblar las acciones para impulsar el desarrollo.
En esa línea, sostuvo Pajín, se debe dialogar en la próxima Cumbre Iberoamericana, convocada para el 7 de noviembre en Santiago de Chile y que tiene como lema central la "Cohesión social y políticas sociales para alcanzar sociedades más inclusivas en Iberoamérica".
"Debemos cooperar en todos los ámbitos que sea posible pero, siempre teniendo presente que la simple ayuda no resuelve los problemas, sino que hay que lograr un desarrollo económico y social, base indiscutible para una vida mejor para todos", apuntó.
