Los precios del crudo volvieron a subir esta semana a medida que se sedimentan factores coyunturales, como las mermas en la producción de África o el Mar del Norte, junto con los cuellos de botella en refinerías y una mayor demanda de gasolina por las vacaciones en América del Norte.
"Hay demasiados factores contingentes en el mercado, y todos apuntalan la tendencia del encarecimiento relativo del petróleo", observó a IPS Francisco Mieres, profesor del posgrado en Economía Petrolera de la Universidad Central de Venezuela.
En Nigeria, productor diario de 2,5 millones de barriles de 159 litros, está interrumpida la producción de unas 550.000 unidades por la acción del Frente de Liberación del Delta del Níger, principal zona petrolera de ese país.
En Angola, durante varios días, la compañía francesa Total debió reducir a la mitad la producción en el campo Dalia, del que extrae 220.000 barriles diarios.
Mientras algunas refinerías en Estados Unidos completaban labores de mantenimiento, subió la demanda del más popular derivado, la gasolina, situándose las existencias a mediados de julio en 203,3 millones de barriles, una baja de 2,3 millones en una semana.
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El crudo West Texas Intermediate (WTI), marcador estadounidense, cerró este viernes en el mercado de En Nueva York a 75,90 dólares por barril, 33 centavos de dólar más que el jueves.
En Londres, el crudo Brent del Mar del Norte, referencia europea, se transó a 77,51 dólares por barril, una merma de 16 centavos respecto de la víspera.
Los promedios semanales mostraron un alza de más de dos dólares en el WTI y de casi un dólar en el Brent, pues fueron de 74,61 dólares para el crudo estadounidense y 76,76 dólares para el europeo. La cesta de 12 crudos que utiliza la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) promedió durante la semana 72,48 dólares, 89 centavos más que en la semana anterior, informó el Ministerio de Energía en Venezuela, cuyo cóctel petrolero se exporta ya a 69 dólares.
"El precio del barril de petróleo va rumbo a los 100 dólares, no lo para nadie", comentó desde Managua, donde está de visita, el presidente de Venezuela, Hugo Chávez.
Los mercados leen otros indicadores, como el crecimiento económico de China, segundo consumidor mundial después de Estados Unidos, que registró un alza de su producto de 11,9 por ciento en el segundo trimestre de 2007, el mayor registro en 11 años.
Corea del Sur, cuarto importador petrolero del mundo, compró en junio 3,8 por ciento más de petróleo que en el mismo período del año anterior.
Luis Giusti, ex presidente de Petróleos de Venezuela (Pdvsa) y consultor en el Centro de Estudios Estratégicos basado en Londres, comentó a IPS que "el crecimiento de la economía global acelera la demanda de petróleo".
"Un crecimiento del producto bruto de cuatro por ciento conlleva una demanda de crudo adicional de dos por ciento", explicó.
Las previsiones de la Agencia Internacional de Energía, de países industrializados, muestran que el mundo consumirá 86 millones de barriles diarios a lo largo de 2007, pero hasta 88,2 millones de unidades en 2008.
El aumento de la demanda llega "cuando los fundamentos tradicionales del mercado han cambiado, porque antes reposaban en una capacidad excedentaria cómoda, el mundo podía producir ante contingencias entre ocho y nueve millones de barriles adicionales, y ahora sólo se cuenta con alrededor de dos millones de barriles por día", dijo Giusti.
Adicionalmente, este año el mercado sintió el golpe de los recortes pactados a fines de 2006 por 10 de los 12 socios de la OPEP (excluidos Angola e Iraq) y que apuntalan los precios al mantener en unos 30 millones de barriles su oferta total.
La OPEP está formada por Angola, Arabia Saudita, Argelia, Emiratos Árabes Unidos, Indonesia, Irán, Iraq, Kuwait, Libia, Nigeria, Qatar y Venezuela.
Sobre esas bases y dada la robustez de la economía y del consumo, el mercado se torna frágil y por eso registra la tendencia al alza, explicó Giusti.
Por su parte, Mieres puntualizó que "esas son tendencias ya firmes y que difícilmente van a cambiar a medida que avanza el verano boreal", cuando es mayor la demanda de gasolina.
Giusti cree que los precios se mantendrán en la banda de los 70 dólares durante semanas o meses, podrían alcanzar un pico cuando en agosto contingentes de vacacionistas se lancen a las carreteras de estados Unidos, pero podrían bajar un poco al acercarse 2008 o a comienzos de ese mismo año.
