«La guerra comienza en la mente de los hombres», dice Sushil Kumar Modi, promotor del arte contemporáneo y uno de los más famosos expertos en la materia en India.
Modi, heredero de uno de los mayores imperios comerciales de este país, toma prestada de la carta de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) la explicación sobre el origen de los conflictos bélicos y ofrece una receta para influir en la mente de los hombres.
Modi encargó a pintores indios internacionalmente reconocidos cuadros que reflejaran la concepción de sus autores sobre la paz, con la idea de organizar una muestra itinerante, denominada "El Poder de la Paz", con la que recorrería diversas naciones.
En una entrevista con IPS, el especialista explicó cómo invirtió casi cuatro millones de dólares para reunir, "dolorosa y amorosamente", una única colección de 52 obras de artistas que incluyen a M. F. Husain, quien vive en Dubai, S. H. Raza, radicado en París, y Uday Dhar, nacido en Gran Bretaña.
"El esfuerzo valió la pena. Vivimos en una época de conflicto y confrontaciones, guerras y ataques terroristas que tienen su origen en la intolerancia religiosa y en la ambición de poder", indicó.
"Necesitamos comunicarnos ¿y qué mejor medio que el arte, este lenguaje universal? A diferencia de lo que ocurre con la palabra hablada, que en muchas ocasiones cae en el olvido, el arte reflejado en la pintura y el mensaje que transmiten permanece para siempre", agrega.
Estar en contacto con algunas de las mentes más creativas del mundo y lograr que contribuyan con su empresa fue para Modi sólo parte del atractivo del proyecto. "Cada artista tiene su particular visión del mundo y visualiza la paz de una manera única", indica.
En el caso de Raza, cuya obra es reconocida por su calidad espiritual, la paz es una serie de círculos concéntricos, pintados en tonos arcillosos en torno a un deslumbrante centro que tiene el efecto de expandir la luminosidad del cuadro.
La obra, que lleva como título "Shanti" (paz), describe "la luminosidad de la vida, que fluye lentamente junto a la luz blanca de la eternidad", dice su autor.
La paz, para M. F. Husain, es inseparable del amor, del incondicional, constante y desinteresado amor que Radha, la ordeñadora de vacas, tiene por la diosa Krishna, flautista y pastora. "Esta es la clase de amor que cada uno de nosotros debe sentir por toda la humanidad para alcanzar la paz permanente", sostiene.
No sorprende, dado que se trata de una colección de arte contemporáneo de India, que tres de los pintores, Akbar Padamsee, Suhas Bahulkar y Shuvaprasanna, hayan realizado obras con la imagen de Mahatma Gandhi, el apóstol de la paz y la no violencia.
Bahulkar retrató a Gandhi entre íconos religiosos destruidos. "Aunque ninguna religión posee toda la verdad, el corazón de la religión es la búsqueda de la verdad en camaradería con los demás, no proclamar que se es dueño de la verdad", señala.
"El camino que nos mostró Gandhi enseña que personas de diferentes religiones pueden generar una cultura de la paz, incorporando enseñanzas de las distintas religiones del mundo aunque permanezcan fieles a su propia fe", agrega Bahulkar.
La muestra "El Poder de la Paz" fue inaugurada en octubre en París y luego se trasladó a Bali, donde la Unesco realizó el Foro Mundial por la Paz entre el 21 y el 23 de enero. Su próxima escala será Tokio.
"Entre el 18 y el 23 de julio exhibiremos la muestra en el Museo Real Ueno. La colección también se expondrá en diversos sitios en Gran Bretaña este año, incluyendo la Cámara de los Lores en octubre", explicó Modi.
La calidad artística de la colección quedó confirmada por el hecho de que varios coleccionistas que ofrecían comprar las piezas debieron ser desalentados en las distintas exhibiciones.
"Estas muestras no persiguen un fin comercial y es por eso que siempre las realizamos en prestigiosos museos o ámbitos. La idea es que las personas vean estas piezas de arte y se lleven el mensaje de la paz", apuntó.
El trabajo de organizar las exhibiciones, agregó, fue facilitado en gran medida por el Instituto Internacional de Bellas Artes de Nueva Delhi, del cual Modi es su presidente. El instituto tiene acuerdos de cooperación con otras prestigiosas instituciones como la Universidad de las Artes de Londres y la Escuela de Arte La Salle-SIA de Singapur.
La muestra itinerante, más allá de su propósito de promover la paz, ha tenido el efecto de hacer conocer al mundo el arte indio contemporáneo, frecuentemente eclipsado por la magnitud de las creaciones del rico pasado cultural del país.
Aunque antes todo un género estaba ausente, ahora obras contemporáneas de Husain, Raza y otros artistas aparecen con regularidad en los catálogos de casas de remates como Sotheby y Christies. Se alcanzó un punto en el arte indio en el cual las preferencias personales están dejando lugar a puras propuestas de negocios.
"El arte indio contemporáneo es uno de los mejores en el mundo y vital para el crecimiento del arte en su conjunto", concluyó Raza.