Organizaciones ecologistas de España lograron este lunes suspender la tala de un bosque milenario que es hábitat de aves en vías de extinción y donde se planea desarrollar un complejo urbanístico. Tras levantar su clasificación como área protegida, la tierra fue vendida al precio base de la subasta.
El proyecto urbanístico, que implica talar miles de árboles centenarios, incluye la construcción de 1.600 viviendas campestres de lujo, dos hoteles de alta categoría y un campo de golf, en una extensión de 215 hectáreas de las Navas del Marqués, provincia de Ávila, un paraje ubicado 75 kilómetros al noroeste de Madrid.
Antonio Vercher, fiscal especial de Medio Ambiente, ordenó este lunes al alcalde de Las Navas del Marqués, miembro del centroderechista Partido Popular (PP), que paralizara la tala de árboles, cumpliendo así con una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Autónoma de Castilla y León, a la que pertenece esa localidad.
La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, de quien depende el fiscal, declaró este lunes que es "extraordinariamente importante" que la justicia reconduzca el caso positivamente y no deje impune a la empresa promotora, Residencial Aguas Nuevas S.L.
Aunque esa sentencia se dictó la semana pasada, el alcalde Gerardo Pérez permitió que la compañía privada que montó el proyecto inmobiliario iniciara la tala el sábado 7, que duró hasta el mediodía de este lunes, lapso en que derribaron un millar y medio de robles y pinos centenarios. La compañía, a su vez, argumentó que la sentencia no era firme y no se le había comunicado formalmente.
El sitio se encuentra dentro de la Zona de Especial Protección para las Aves, que está incluido en la lista de Áreas Importantes para las Aves (IBAS, por sus siglas en inglés) elaborada por Birdlife, una sociedad científica internacional de la que forma parte España.
A pesar de que el gobierno de Castilla y León aceptó esas clasificaciones, recalificó 215 hectáreas para que pudieran ser urbanizadas y las sacó a subasta por cerca de 12 millones de dólares. Un constructor vinculado al PP, Francisco Gómez, fue el único que se presentó y logró que se le adjudicara el terreno a 6,3 dólares el metro cuadrado, que era el precio de inicio del remate.
Una de las riquezas naturales de la zona afectada es el águila negra que está catalogada por organizaciones científicas como especie en peligro de extinción, y de la que existen 322 parejas en toda España, varias de ellas en Las Navas del Marqués.
El águila negra puede medir hasta un metro de alto y cuando abre sus alas alcanza un una extensión de 160 centímetros de ancho. Se la puede encontrar en la península ibérica entre los meses de febrero o marzo y septiembre u octubre. Por su carácter solitario y huidizo es especialmente vulnerable a los cambios del hábitat donde anida, y en especial de la irrupción de construcciones y de comunidades humanas.
Otra especie amenazada, de la que hay cinco o seis ejemplares en Las Navas del Marqués, es el águila imperial.
Raúl Urquiaga, directivo de la organización no gubernamental (ONG) Grama, dijo a IPS que la paralización de la tala derivada de la orden del fiscal "es un paso adelante y es fruto de la presión que las ONG hemos estado ejerciendo". Sin embargo, añadió, la suspensión "puede ser momentánea si no prosperan las denuncias contra el ayuntamiento (alcaldía) y la empresa constructora, por delitos contra el medio ambiente".
Ocho ONG ecologistas, entre ellas Grama, Greenpeace, Centaurea, la Sociedad Española de Ornitología y Adena, presentaron este lunes una denuncia ante la Fiscalía Especial de Medio Ambiente y Urbanismo, contra la empresa y el alcalde que permitió las operaciones denunciadas.