Aunque invisibles en los ámbitos de la Cumbre, portavoces de la oposición interna de Cuba reclamaron este martes, en tonos diversos de crítica, que la presidencia cubana del Movimiento de Países No Alineados produjera una apertura de derechos civiles y políticos en este país y en otros del grupo.
La exigencia reflota el viejo debate sobre la naturaleza de los derechos humanos, que el proyecto de documento final de la XIV Cumbre, que se celebra desde el lunes en La Habana, expone como una totalidad inseparable compuesta por libertades civiles y bienestar social y económico, condensada en el "derecho al desarrollo".
"El movimiento considera importante la observancia de todos los derechos humanos por todos", dijo el viceministro cubano de Relaciones Exteriores y presidente de la etapa inicial de la reunión, Abelardo Moreno.
El Movimiento de Países No Alineados (NOAL), desde esta semana con 118 miembros, "considera que los derechos humanos son tanto individuales como colectivos, así como también los de tercera generación, tan en boga en estos días, como los de la solidaridad, el desarrollo, la alimentación y otros", agregó Moreno.
Pero la opositora Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional, que funciona en la ilegalidad, estimó en una declaración que "el tema de los derechos humanos no constituye una verdadera y efectiva prioridad en el NOAL".
[related_articles]
"Varias decenas de gobiernos que son miembros plenos del NOAL estarían entre los peores y más contumaces violadores de los derechos civiles y políticos a escala mundial", dice la Comisión, y menciona "entre otros muchos, los casos de Corea del Norte, Myanmar (Birmania), Cuba, Siria, Arabia Saudita, Sudán y Zimbabwe".
Sin embargo, reconoce que en Corea del Norte y Cuba "hay escuelas para todos los niños y nadie está excluido de los servicios médicos básicos" y que "no podemos desconocer que todos los miembros plenos del NOAL tratan de introducir mejoras en sus países en materia de derechos humanos".
Por su parte, el también ilegal grupo disidente Arco Progresista sugiere a La Habana que, "a fin de ser coherente con su propio discurso, que reclama la unidad de acción y la democracia como factores vitales para el Tercer Mundo, debe ponerse a tono con el resto de los miembros de la organización".
"Es esta, pues, una ocasión propicia para que el gobierno cubano inicie pasos firmes en ese sentido, permitiendo la expresión pública y libre del pluralismo político de la sociedad cubana y respetando todos los derechos humanos en su territorio: dos exigencias mínimas para la existencia de cualquier democracia", agrega.
En un tono más duro, la Comisión de Derechos Humanos considera que la "mayoría de las delegaciones de los miembros plenos, especialmente los de África y Asia, representan a regímenes dictatoriales o autoritarios permeados por la corrupción, el nepotismo y otras deformaciones".
La entidad opositora también rechaza el énfasis que esta reunión ha dado al relanzamiento del NOAL por medio del refuerzo de la coordinación política internacional, que considera un "pretexto para bloquear o lentificar cualquier iniciativa encaminada a la promoción y protección efectiva de los derechos humanos".
Arco Progresista, en cambio, considera que "la actual decisión de revitalizar el Movimiento se enmarca en una época en la cual ha quedado demostrado que es preciso evitar los caminos de la confrontación y apostar por el diálogo".
Ésta es la "única vía posible para encontrar soluciones reales y duraderas a las agudas crisis que sacuden al mundo y que repercuten con más fuerza sobre los países subdesarrollados", agrega.
Por decisión expresa, el NOAL no pretende establecer una cohesión cultural, ideológica, económica o política entre sus miembros, sino coordinar principios generales de actuación frente a las potencias que hegemonizan la arena internacional.
El viceministro Moreno recordó que el movimiento no alineado ha enfatizado desde sus orígenes, en 1955, el principio básico de la no intervención y la autodeterminación como piedra angular de sus relaciones internas.
Esos principios fueron abrazados por 29 líderes poscoloniales de Asia y África en la conferencia de Bandung, Indonesia, antecedente del NOAL, fundado oficialmente en 1961 en Belgrado.
Felipe Pérez Roque, ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, insistió al inicio del encuentro de La Habana que la presidencia cubana intentará convertir al Movimiento en una "fuerza decisiva", a través de su voto mayoritario en los organismos internacionales, particularmente en la Organización de las Naciones Unidas.
Cinco de las 86 páginas del proyecto de declaración final de la Cumbre se concentran en los derechos humanos, enfatizando la indivisibilidad de las libertades políticas con los derechos sociales a la alimentación, la salud y la educación.
El documento insta a que "durante el debate sobre los derechos humanos se preste debida atención a la cuestión de la pobreza, el subdesarrollo, la marginación, la inestabilidad y la ocupación extranjera, que engendran la exclusión social y económica y la violación de la dignidad humana".
Moreno subrayó este martes que "el Movimiento siempre ha considerado que la problemática de los derechos humanos no puede ser politizada, y su discusión debe ser objetiva, transparente y sin doble rasero".
