Alejado del poder desde el 31 de julio y ausente físicamente de la XIV Cumbre del Movimiento de Países No Alineados (NOAL) por razones de salud, Fidel Castro fue elegido presidente del grupo por aclamación y fue el centro de la atención en la sesión inaugural de este viernes.
Mensajes con augurios de pronta recuperación, historias de encuentros personales con el líder cubano y hasta citas textuales de sus discursos marcaron la primera jornada del segmento de alto nivel de la Cumbre iniciada el lunes, y que reúne a gobernantes de unos 50 de los 118 países del NOAL, tras la incorporación en La Habana de Haití y San Cristóbal y Nevis.
"O logramos darle un viraje al mundo y humanizarle, o estaría en peligro la propia especie humana. Ya lo dijo Fidel: mañana puede ser demasiado tarde", dijo el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, al hablar en nombre de los países de América Latina y el Caribe.
Chávez inició su discurso llamando la atención sobre la importancia del país donde se realiza la Cumbre, sede de una anterior en 1979, y el momento especial que vive desde que Castro debió "delegar provisionalmente" sus funciones al frente del gobierno, el gobernante y único Partido Comunista y las Fuerzas Armadas.
"Estamos seguros de que Cuba tendrá éxito en esta tarea al frente de la presidencia (del NOAL) los próximos tres años. Todo el mundo sabe que Venezuela se pone a la orden de Cuba para ayudar modestamente e impulsar una nueva era", dijo Chávez.
"Puedo asegurarles que su salud mejora muy bien. Me apretó con fuerza la mano", dijo en la ceremonia inaugural el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Kofi Annan, tras resaltar "las dotes de mando" demostradas por Castro en el pasado del NOAL, y asegurar que la misión del movimiento era "más pertinente que nunca antes".
En consonancia con los reclamos del NOAL, Annan aseguró que el Consejo de Seguridad de la ONU "debe reformarse por el bien de los países en desarrollo y de las Naciones Unidas". "La concentración del poder en unos pocos resulta muy difícil de sostener", añadió.
El pensamiento de Castro estuvo también en cada palabra pronunciada por el mandatario interino de Cuba, su hermano Raúl Castro, quien asumió como "presidente en funciones" de la Cumbre de jefes de Estado y de gobierno.
"Defendamos el derecho de nuestros países al uso pacífico de la energía nuclear. Reclamemos el desarme general y completo, incluido el desarme nuclear. Rechacemos la peligrosa doctrina norteamericana (estadounidense) del empleo 'preventivo' del arma nuclear, incluso contra países que no la posean o contra supuestos grupos terroristas", llamó Raúl Castro.
"Denunciemos la hipocresía del gobierno de los Estados Unidos, que mientras apoya a Israel en la ampliación de su arsenal nuclear, amenaza a Irán para impedirle el empleo pacífico de la energía nuclear", agregó.
El encuentro concluirá este sábado con la aprobación de una declaración final, aún en negociación, y de una segunda, propuesta por Cuba, que ratifica los principios fundacionales del movimiento, en sintonía con el derecho internacional y la Carta de las Naciones Unidas.
Además del no alineamiento con bloques militares, el movimiento defiende el principio de no injerencia en los asuntos internos de los países, la soberanía de los Estados miembros, el derecho de éstos a elegir el sistema político, económico y social que consideren más adecuado a sus intereses nacionales y la preservación de las culturas originales.
"Representamos casi dos tercios de la membresía de Naciones Unidas, pero no somos la fuerza decisiva que pudiéramos ser en las relaciones internacionales" como foro de concertación política de los países del Sur, dijo Castro en su discurso.
"La actual coyuntura internacional, caracterizada por las irracionales pretensiones de dominio mundial por parte de la única superpotencia global", Estados Unidos, demuestra la necesidad de "estar cada vez más cohesionados en la defensa de los principios y propósitos que determinaron la fundación de los No Alineados".
El neoliberalismo es la causa de la marginación de las naciones pobres, señaló el presidente sudafricano Thabo Mbeki, quien habló en nombre del Grupo de los 77 países en desarrollo, el mayor bloque dentro de la ONU con 133 miembros, incluida China.
Mbeki exhortó a fortalecer la cooperación entre los países del Sur.
Otros oradores de la sesión matutina, como el presidente de Irán, Mahmoud Ahmadinejad, de Irán, y su par de la República del Congo, Denis Sassou Nguesso, coincidieron en mencionar a Cuba como gran impulsora de la causa del NOAL.