El empresario Carlos Ahumada, preso y acusado de fraude en México, afirmó que varios vídeos exhibidos en 2004 y que lo involucraban en actos de corrupción tenían el propósito de dañar al candidato de la izquierda mexicana Andrés López Obrador.
El postulante del Partido de la Revolución Democrática (PRD), inmerso ahora en una batalla legal y política por el resultado de los comicios presidenciales del 2 de julio, ha dicho reiteradas veces que círculos del gobierno y del poder político y económico complotaron contra él.
Una radioemisora reprodujo este viernes una grabación en la que el empresario Ahumada, de origen argentino, declara que la serie de vídeos que exhibían en presuntos actos de corrupción a colaboradores de López Obrador habían sido entregados a la televisión por autoridades de gobierno.
Los vídeos, difundidos cuando López Obrador era alcalde de la ciudad de México, fueron grabados por Ahumada y entregados a rivales del político de izquierda, entre ellos el ex presidente Carlos Salinas (1988-1994), según declaró el empresario.
Luego llegaron a manos del gobierno de Vicente Fox, desde donde pasaron a los medios de comunicación con la intención de desbaratar las aspiraciones políticas de López Obrador, dijo Ahumada.
Las declaraciones son parte de otra cinta de vídeo de 11 minutos que al parecer corresponde a uno de los interrogatorios a los que Ahumada fue sometido en Cuba, país al que había escapado y donde fue detenido en 2004 y deportado a México.
No se sabe con certeza quién entregó esta nueva cinta a los medios de comunicación mexicanos. Pero la radioemisora Monitor que difundió parcialmente el audio afirmó que, según sus investigaciones, fue el PRD, que las habría recibido directamente de Cuba.
Según López Obrador, el gobierno del conservador Partido Acción Nacional (PAN) y "los poderosos" buscan frenarlo desde hace varios años por diversos medios. En esa línea actuó Ahumada y se llevó a cabo un fraude en las elecciones presidenciales del 2 de julio, alega el candidato.
Según el escrutinio oficial, el postulante del PAN, Felipe Calderón, ganó esos comicios por un estrecho margen.
Carlos Noroña, portavoz del PRD, dijo a IPS que el relato de Ahumada conocido este viernes "acredita lo que venimos diciendo desde hace mucho: que el gobierno y otros estuvieron detrás de la idea de sacar a López Obrador de la carrera presidencial".
El portavoz sostuvo que ahora se pretende consumar un "fraude" para imponer ilegalmente a Calderón como presidente. Hay miles de boletas electorales perdidas y otras que aparecieron sin explicación, lo que permitiría a la "derecha" declararse vencedora, afirmó.
El PRD presentó al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación una serie de impugnaciones a varias casillas que recogieron los votos el 2 de julio. Los magistrados emitirán un fallo final e inapelable sobre la validez de las elecciones y sobre su resultado a más tardar a fines del mes en curso.
El gobierno, sectores empresariales y analistas señalan que no hay ninguna evidencia de fraude, pero piden esperar la resolución del Tribunal. La izquierda señala que hará lo mismo, pero advierte que desconocerá su fallo si la elección no se limpia con un recuento voto por voto o en su defecto se declara vencedor a López Obrador.
Un estudio estadístico de las votaciones, realizado por los investigadores y politólogos Alejandro Poiré, de la Universidad de Harvard, y Luis Estrada, de la Universidad de California, ambas de Estados Unidos, no encontró evidencias de fraude o manipulación.
IPS supo que este estudio es parte de los expedientes que revisan los miembros del Tribunal.
El columnista del diario El Gráfico, Salvador García, estimó que la aparición de la última grabación de Ahumada fue una jugada del PRD para "reforzar la idea de que hay un complot en su contra desde hace varios años o meses".
Ahumada señala que utilizó las filmaciones de colaboradores del candidato de la izquierda para negociar protección del gobierno y de otros actores ante las acusaciones de fraude que pesaban sobre él, lo que finalmente no consiguió, según apuntó.
Ahumada es dueño de una compañía constructora que tenía varios contratos con la alcaldía de la capital hasta que en 2001 asumió López Obrador. Según afirma ese empresario, el entonces alcalde cortó la relación con él y lo extorsionó a través de sus operadores, acusaciones que niega tajantemente el ahora candidato presidencial.
Tras la difusión de los vídeos en 2004, Ahumada huyó a Cuba, pero allí fue detenido y deportado a México, donde permanece desde entonces en prisión mientras es juzgado por fraudes y lavado de dinero.
En las cintas se observa a cercanos colaboradores de López Obrador recibiendo miles de dólares de Ahumada, y al ex secretario de Finanzas del gobierno de la ciudad, Gustavo Ponce, apostando grandes cantidades de dinero en casinos de la sudoccidental ciudad estadounidense de Las Vegas.
El senador del PAN, Diego Fernández de Cevallos, reconoció este viernes haber visto los vídeos antes de su difusión, pero negó haberlos entregado a medios de comunicación.
"Y si así fuera, eso no importa ya. Lo único cierto es que allí se ve a colaboradores de López Obrador en actos de corrupción y esa es una verdad", declaró.
Los críticos de López Obrador le reprocharon en 2004 no haber reconocido que sus colaboradores eran corruptos y en cambio haber presentado un discurso acerca del complot en su contra.
Como alcalde, y en el último tramo de su gestión en 2005, López Obrador afrontó una acusación de la Procuraduría (fiscalía), que depende del presidente Fox, por no acatar una orden judicial sobre un terreno que habría expropiado ilegalmente la alcaldía. El Congreso legislativo llegó a retirarle el fuero por esa acusación.
Pero el caso no hizo más que elevar su popularidad. El propio Fox dispuso que la Procuraduría desistiera de la acusación y luego relevó a su titular. Así López Obrador tuvo el camino libre para postularse a la Presidencia, una carrera que sigue con final abierto.
