El nombre del presidente venezolano Hugo Chávez vuelve a mencionarse con insistencia en una campaña electoral de Ecuador, como ya había ocurrido en las elecciones presidenciales de 2002, cuando se lo comparaba con Lucio Gutiérrez.
En esta oportunidad, el líder indígena Luis Macas, del Movimiento Pachakutik, y Rafael Correa, de Alianza País, son los candidatos vinculados por los medios de comunicación o por analistas políticos a Chávez, debido a su identificación con el mandatario bolivariano y a reuniones mantenidas con él en las últimas semanas.
Si bien no fue divulgada por su equipo de campaña ni por el movimiento indígena, algunos medios de comunicación difundieron la noticia de que en julio, cuando ya era candidato, Macas viajó a Caracas para reunirse durante varias horas con Chávez, lo que fue admitido a IPS por el postulante.
"Al movimiento indígena ecuatoriano le unen lazos de solidaridad con el presidente de la República Bolivariana de Venezuela desde hace años. Cuando pocos se solidarizaban con Venezuela ante el intento de golpe de Estado promovido por Estados Unidos, nosotros sí lo hacíamos, por lo tanto hay una identificación", afirmó Macas a IPS.
Chávez tiene mucho respeto por el movimiento indígena ecuatoriano y lo ha reconocido en diversas oportunidades, aseguró Macas. Existen afinidades entre la propuesta del movimiento indígena ecuatoriano, "que surgió antes que Chávez" y la propuesta del gobierno bolivariano, agregó.
"Hay afinidades que van más allá de un hecho coyuntural como pueden ser las elecciones ecuatorianas. Como hay afinidad con Evo Morales (el mandatario de Bolivia) y con otros presidentes sudamericanos que están llevando adelante una política soberana e integradora en América Latina", sostuvo Macas.
Sobre su última reunión con Chávez, el postulante aseguró que fue en el marco de un viaje a Venezuela por invitación de organizaciones sociales y políticas interesadas en el proceso del movimiento indígena ecuatoriano.
"Tuvimos una larga reunión de varias horas, en la que intercambiamos opiniones sobre la realidad de América Latina, los procesos indígenas, la necesidad urgente de integración regional, la posibilidad de un complemento entre Venezuela y Ecuador en muchas áreas, diversos temas de interés de nuestros países, así como temas internacionales de importancia, pero no tocamos el tema electoral de Ecuador", afirmó Macas.
"Chávez es el presidente de un gobierno con el que tenemos muchas facilidades para realizar acuerdos bilaterales en muchos ámbitos, e integrarnos dentro de la gran nación sudamericana que queremos construir. No fue la primera vez que nos encontramos, pero sí fue la reunión más larga. Y en el futuro tendremos otras reuniones, como seguramente las tendremos con otros presidentes sudamericanos con los cuales nos sentimos identificados", dijo el líder indígena.
Por su parte, Correa aseguró mediante un comunicado público de su equipo de campaña, que se había encontrado con Chávez la semana pasada cuando viajó a Caracas.
Consultado por el Canal de TV Gamavisión, Correa aseguró que viajó a Venezuela para dictar conferencias, y que Chávez, al enterarse de que estaba en el país, lo invitó a la casa de sus padres, en el estado de Barinas.
"No tengo vinculaciones con el movimiento bolivariano venezolano, tengo una amistad personal con el presidente Hugo Chávez", dijo Correa.
El venezolano "estaba en la casa de sus padres, en su estado natal de Barinas, así que dormimos ahí y pasamos una velada agradable, una cena familiar en donde su propia madre servía. Chávez es un hombre muy sencillo", apuntó.
Si bien Macas y Correa cuentan con apoyo de algunos de los pequeños grupos denominados bolivarianos que han surgido como hongos en los últimos dos años en Ecuador, no se considera que sean un elemento de peso para indicar sus vínculos con el gobernante del país vecino, por su escasa representatividad.
Macas es apoyado por el Movimiento Socialista Bolivariano, dirigido por el ex diputado Diego Delgado, salido hace algunos años del Partido Socialista Ecuatoriano y vinculado a diversas organizaciones sociales.
Correa es respaldado por el Movimiento Bolivariano Alfarista, liderado por el general retirado René Vargas Pazos, quien fue jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas en 1980.
Vargas Pazos aspiraba a ser escogido por Correa como su compañero de fórmula, lo que no ocurrió, por lo cual buscó acercarse a Macas para intentar una alianza que tampoco prosperó.
Macas es uno de los fundadores de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador y su presidente más reconocido dentro y fuera del movimiento aborigen.
Fue además ministro de Agricultura en los seis primeros meses del gobierno de Lucio Gutiérrez (2003-2005) del que se retiró cuando su Movimiento Pachakutik consideró que había sido traicionado el programa común.
Correa fue ministro de Finanzas en los primeros meses del actual gobierno, entre abril y agosto de 2005, cuando mantuvo un discurso económico de radical oposición al modelo neoliberal que, sin embargo, no se tradujo en medidas, y finalmente renunció para lanzar su candidatura presidencial.
En Ecuador que un candidato aparezca vinculado a Chávez cobra mayor importancia que en otros países, porque puede tener influencia sobre cierta parte del electorado. El mandatario cuenta en este país con la simpatía de 80 por ciento de consultados en encuestas, mayor que la que goza en Venezuela.
El presidente venezolano ha preferido no pronunciarse sobre el proceso electoral ecuatoriano, al contrario de lo que hizo respecto de Perú.
"No creo que el presidente Chávez quiera involucrarse a favor de ninguno de los candidatos que participan en las elecciones de Ecuador, y en ningún momento se ha pronunciado" pues "es muy respetuoso de la política interna ecuatoriana y de los distintos sectores que tenemos afinidad con su gobierno", argumentó Macas.
En marzo, durante un levantamiento indígena liderado por Macas que provocó la declaración de caducidad del contrato entre el Estado y la petrolera estadounidense Occidental y la suspensión de las negociaciones de un tratado del libre comercio (TLC) con Estados Unidos, el actual candidato fue vinculado por el gobierno con Chávez.
El secretario de Comunicación de la Presidencia, Enrique Proaño, acusó entonces a Caracas de financiar la movilización indígena.
Eso dio pie a una dura carta de protesta del gobierno venezolano, ante la cual Quito pidió disculpas.
Esta semana, el multimillonario empresario bananero Álvaro Noboa, candidato a la Presidencia por el Partido de Renovación Institucional Alianza Nacional, acusó a Correa de recibir financiación del gobierno venezolano.
Paradójicamente, algunos de los más cercanos colaboradores de Noboa durante la campaña electoral de 2002, hoy están próximos a Correa, como el ex diputado Carlos Vallejo.
En 2002, Noboa perdió las elecciones en la segunda vuelta frente a Gutiérrez, quien había elogiado a Chávez en reiteradas oportunidades, pero ya en el poder tomó distancia del venezolano.
En un episodio similar al protagonizado por Chávez, Gutiérrez había participado el 21 de enero de 2000 de una rebelión militar e indígena que derrocó al gobierno del entonces presidente Jamil Mahuad, hecho que, como su condición común de uniformados, los acercaba.
El venezolano ha sido protagonista de varios procesos electorales en América Latina.
En las elecciones de este año en Perú, Chávez no dudó en mostrar sus preferencias por el nacionalista y militar retirado Ollanta Humala, quien perdió frente a Alan García por poco margen.
En México, el candidato conservador Felipe Calderón acusó a su competidor, el izquierdista Andrés López Obrador, de cercanía con el venezolano.
En Ecuador, la campaña para las elecciones del 15 de octubre dio inicio oficialmente el martes. Las empresas encuestadoras más conocidas, como Perfiles de Opinión, Cedatos e Informe Confidencial, aseguran que faltando 46 días para los comicios, 70 por ciento de la ciudadanía no ha definido su voto.
De los consultados que se declaran definidos, una proporción cercana a 40 por ciento aseveraron que votarían en blanco o nulo.
Además de Macas, Correa y Noboa, los postulantes con opciones de pasar a la segunda vuelta son el socialdemócrata León Roldós, de la Alianza Red ÉticaIzquierda Democrática, y la derechista Cinthya Viteri, del Partido Social Cristiano.