La DINA, policía secreta de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), y Colonia Dignidad, el enclave de emigrantes alemanes en el sur de Chile, crearon una asociación ilícita con fines criminales, señaló este lunes el juez Jorge Zepeda al ordenar el procesamiento de 18 miembros de las cúpulas de ambas organizaciones.
"Nos parece muy positiva la resolución del ministro (magistrado) Zepeda. Esperamos que permita conocer y avanzar en la búsqueda de la verdad en cuanto a los asesinatos y desapariciones que se cometieron en Colonia Dignidad", dijo a IPS Lorena Pizarro, presidenta de la Agrupación de Familiares de Detenidos-Desaparecidos (AFDD).
Zepeda encausó al general retirado Manuel Contreras, ex jefe de la DINA (Dirección de Inteligencia Nacional), y a su lugarteniente, el brigadier en retiro Pedro Espinoza, quienes están encarcelados por otros delitos, y a otros dos militares retirados ex agentes de ese cuerpo represivo, el coronel Fernando Gómez y el mayor Armando Fernández Larios.
Fernández Larios permanece desde 1987 en Estados Unidos bajo identidad falsa y protección de las autoridades, luego de que desertó del Ejército chileno y testificó como acusador de Contreras y Espinoza en el juicio por el asesinato en 1976 en Washington del ex canciller chileno Orlando Letelier.
Paul Schäfer, el fundador en 1961 de Colonia Dignidad, detenido desde el 10 de marzo de 2005, encabeza la lista de ex jerarcas del enclave alemán procesados por Zepeda bajo cargos de violaciones de derechos humanos, infracciones a la ley de armas, maltratos a personas y abusos sobre menores.
Gerhard Mucke, Karl Van den Berg, Kurt Schnellenkamp, Hartmut Hopp, lugartenientes de Schäfer ya arrestados como cómplices de violaciones de menores, fueron también procesados por el juez, al igual que Albert Schreiber, quien se encuentra en Alemania y podría ser extraditado a Chile.
La lista de alemanes procesados se completa con la hija adoptiva de Schäfer, Rebeca, quien vive en Argentina, al igual que otros tres ex colonos de Dignidad que protegieron al jefe de la colonia, prófugo desde 1997, hasta su arresto hace 13 meses en una localidad cercana a Buenos Aires.
Schäfer, un ex cabo del ejército nazi, fundó en 1961 la Colonia Dignidad en un vasto predio agrícola cerca de la ciudad de Parral, 340 kilómetros al sur de Santiago, donde se comenzaron a producir denuncias de retenciones ilícitas de personas desde 1966, las cuales fueron sin embargo ignoradas por las autoridades chilenas.
El manto de impunidad que favoreció a este enclave de emigrantes se fortaleció desde el golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973, cuando Schäfer facilitó a la DINA el uso de instalaciones de la colonia como centro de interrogatorios, torturas, asesinatos y desapariciones forzadas de presos políticos de izquierda.
"Efectivamente, desde los años de la dictadura todos sabíamos de la represión en el enclave alemán por parte de agentes de la DINA. La resolución del juez Zepeda viene a ratificar nuestras denuncias", indicó Pizarro, quien dijo desconocer el número exacto de desapariciones y asesinatos de presos cometidos en la colonia.
"Entendemos que esa información saldrá a la luz en el proceso. El magistrado ha sido extremadamente cauto en la reserva de información, ya que hemos visto como Colonia Dignidad se ha salvado de acusaciones anteriormente gracias a sus redes de apoyo", comentó la presidenta de la AFDD.
Schäfer y sus secuaces gozaron hasta 1997 de impunidad, gracias a una red de políticos, empresarios, militares y probablemente jueces que protegían a la colonia para pagar diversos favores, según denunciaron en su hora el senador socialista Jaime Naranjo, activistas de derechos humanos e investigaciones periodísticas.
Pizarro no descartó que en la medida en que avanzara la investigación de Zepeda surgirían antecedentes para inculpar también al ex dictador Pinochet, de 90 años. "No cabe duda de que el principal responsable de la represión fue Pinochet. Era el jefe directo de la DINA, que desayunaba a diario con Contreras para darle sus órdenes", dijo.
La AFDD presentó en enero una querella criminal contra la DINA y Colonia Dignidad luego de que en diligencias ordenadas por Zepeda se descubrieron fosas de dos metros de profundidad donde habían sido sepultadas víctimas de desapariciones forzadas, cuyos restos fueron removidos en 1978 por órdenes de la dictadura.
El Ministerio del Interior y el Consejo de Defensa del Estado también se hicieron parte como acusadores en las causas por violaciones de derechos humanos cometidas en Colonia Dignidad por la DINA, cuerpo represivo que Pinochet disolvió en 1978 para crear la Central Nacional de Informaciones (CNI).
El viceministro del Interior, Felipe Harboe, expresó este lunes la satisfacción del gobierno de Michelle Bachelet por la resolución del magistrado y por los avances que se registran en la investigación del hasta ahora misterioso enclave de emigrantes alemanes.
Es un hecho "emblemático" que "aquellos que en nuestra historia hicieron horrores dentro de ese territorio (Colonia Dignidad) hoy día han sido sometidos a proceso. Esperamos que siga adelante el curso de la investigación para poder finalmente condenarlos", señaló Harboe.
Las indagaciones de Zepeda tuvieron un avance sustantivo en los últimos meses, cuando a través de allanamientos en dependencias de Villa Baviera, nombre oficial de la colonia, se descubrieron alrededor de 40.000 fichas, con registros tanto de colonos, como de adultos y niños que pasaron por el lugar, incluyendo también supuestamente a presos políticos.
Los autos de procesamiento dictados este lunes por el juez detallan acciones delictivas cometidas por agentes de la DINA y por algunos colonos alemanes, que implican tanto crímenes contra los derechos humanos como abusos sexuales contra menores, principal cargo contra Schäfer hasta hace un año.
Zepeda fue puesto en cuestionamiento en septiembre de 2005, cuando anuló otra acusación de asociación ilícita contra la Colonia Dignidad, entablada por la jueza de Parral, Jimena Pérez, aduciendo que hasta entonces no se habían reunido los requisitos legales para configurar ese delito.
Los periodistas Han Stange y Claudio Salinas dijeron a IPS que la decisión del juez de encausar a las cúpulas de la DINA y Colonia Dignidad es un gran paso adelante, pero de alcances a su juicio limitados, ya que solo cubre delitos cometidos allí entre 1970 y 1990, dejando de lado otros ilícitos que tuvieron lugar en la década de los años 60.
Stange y Salinas son los autores de una completa investigación publicada en enero de este año como libro bajo el título "Los amigos del 'Dr.' Schäfer. La complicidad entre el Estado chileno y Colonia Dignidad". (