La inminente publicación del próximo libro de Mijail Gorbachov sobre la perestroika, 21 años después de que él mismo la creara, dio origen a un nuevo debate sobre un periodo clave de la historia de Rusia. Y más recelos al respecto.
El libro, cuya publicación está pendiente, tiene como título tentativo "Para comprender la perestroika", según declaró el ex líder de la hoy disuelta Unión Soviética a la agencia de noticias rusa Interfax.
Gorbachov, secretario general del Partido Comunista de la Unión Soviética entre 1985 y 1989 y presidente de esa nación entre 1989 y su disolución, en 1991, impuso en su gestión profundas reformas políticas y económicas, conocidas como "glasnost" (transparencia) y "perestroika" (reestructura).
Las reformas desembocaron en el colapso de la Unión Soviética, cuya expresión más característica fue la declaración de independencia de varias repúblicas que integraban la otrora potencia mundial.
El libro de Gorbachov podría ser recibido de modo tan frío como un discurso que el ex mandatario ofreció el mes pasado ante un auditorio en la Universidad Rusa de la Amistad de los Pueblos.
"Es importante comprender la perestroika como una necesidad urgente que surgía de los procesos profundos de desarrollo de nuestra sociedad en ese momento", dijo.
"Lo importante era traducir la política a la vida cotidiana de las personas, y ése fue el inicio de las actuales reformas democráticas", afirmó.
Gorbachov, quien recibió el premio Nobel de la Paz en 1990, dijo haber escrito el libro tras diversos actos realizados el año pasado para celebrar los 20 años del comienzo de la perestroika.
Pero lamentó no poder llevar a buen puerto sus posteriores iniciativas políticas, alejadas de los deseos de la ciudadanía y del resto del espectro político ruso.
"Allí radica el problema de comprender la perestroika, y es necesario decidir a dónde deberíamos ir, porque el curso liberal radical sería la opción equivocada para nosotros", afirmó.
El discurso de Gorbachov casi no suscitó aplausos. La mayoría de los rusos son escépticos respecto de la perestroika y creen que sus reformas le cuestan a Rusia su estatus de superpotencia.
Una encuesta realizada por la Academia Rusa de Ciencias muestra que sólo 22 por ciento de los entrevistados en este país tienen una opinión positiva de las reformas iniciadas por Gorbachov, mientras que 56 por ciento son críticos de su política.
"Podría decir que hay dos clases diametralmente opuestas de estereotipos sobre la perestroika", dijo a IPS Elena A. Ivanova, del Departamento de Comunicación de Masas en la Universidad Rusa e investigadora sobre la era de Gorbachov.
"Al primer grupo lo podemos llamar de 'estereotipos occidentales'. Muchas personas en Occidente respetan al señor Gorbachov y a su actividad política por marcar el comienzo de un cambio dinámico", expresó.
Pero, dentro de Rusia, los estereotipos sobre la perestroika son lo contrario.
"Muchos de nosotros, especialmente las generaciones mayores, vemos la reforma de Gorbachov y sus consecuencias en la sociedad como privaciones y pobreza, colapso de las familias e inaccesibilidad a servicios de bienestar gratuitos", dijo.
Para muchos ciudadanos soviéticos, la perestroika equivale al colapso, porque trajo conflictos políticos y sangrientas guerras sin fin en los territorios de las ex repúblicas soviéticas, así como la muerte intelectual del pasado soviético, afirmó.
"Ahora Rusia está en la encrucijada, la gente toman opciones y todavía hay muchos que preferirían el sistema soviético que una vez les garantizó un modo de vida básico", dijo a IPS Michael Vishnevsky, investigador sobre las relaciones entre Estados Unidos y Rusia en la Academia Rusa de Ciencias.
"Pero la perestroika de Gorbachov cambió eso para ellos", señaló. "Hay una democracia por y para una clase particular de personas, que es por lo que los rusos ven a la perestroika como un gran error político. Esto se refleja en su estado de ánimo y en sus sentimientos incluso hasta el día de hoy".
"Estamos presenciando una victoria superficial de la democracia moderna, y el país todavía está experimentando los efectos de la transición política de la perestroika", dijo Vishnevsky.
Pero no todos se desesperan. "La situación que se había suscitado a fines de los años 90 fue dictada por las condiciones políticas en la Unión Soviética, y la perestroika proporcionó alguna base para el cambio crucial", dijo a IPS el profesor Dmitry Slizovsky, decano asistente de la Facultad de Ciencia Política de la Universidad Rusa.
"Y la madurez mostrada por Gorbachov para hacerse a un lado para que ese cambio natural ocurriera fue encomiable", afirmó.
Slizovsky calificó a la perestroika como una tragedia política de la era soviética.