Hasta el 15 de este mes se rueda en Chile el filme «The Black Pimpernel» (traducida como «El clavel negro»), recreando los tres meses en que el embajador sueco Harald Edelstam salvó de la muerte o la prisión a más de 1.300 personas tras el golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973.
La película, una coproducción mexicana, sueca, danesa y chilena, recrea la vida del ya fallecido Edelstam, destacado en Chile entre 1971 y 1973, quien luego del golpe militar jugó un papel clave ayudando a perseguidos por la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).
Dirigido por el cineasta sueco Ulf Hultberg, el filme tiene un reparto internacional del que forman parte 32 actores chilenos y 1.700 extras, y un presupuesto de más de tres millones de dólares, informó la productora chilena Umana Films, parte del proyecto.
"'El clavel negro' visibiliza la figura de un héroe poco conocido de la historia de Chile y Suecia, dijo a IPS Sergio Laurenti, director ejecutivo del capítulo chileno de Amnistía Internacional.
Edelstam "mostró un valor muy escondido en las personas en esos días. Es un ejemplo notable que iluminará a mucha gente para que estos hechos no ocurran nunca más y para tomar una responsabilidad individual en la defensa de los derechos humanos", agregó .
El rodaje se realiza desde el 19 de enero en 36 locaciones ubicadas, por primera vez, en los lugares donde ocurrieron los acontecimientos, como el frontis del Palacio de La Moneda, la bombardeada sede del gobierno, la embajada uruguaya y el Estadio Nacional, el mayor centro de torturas por donde pasaron 12.000 opositores luego del golpe militar.
Para Laurenti se trata de una "una importante recuperación de la memoria que ayudará a muchas personas a darse cuenta de la naturaleza brutal de las semanas y meses inmediatamente posteriores del golpe, en las que Edelstam estuvo particularmente involucrado".
En conversación con IPS, Viviana Díaz, dirigente de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos, valoró el "justo homenaje a quien luchó para salvar vidas no sólo de chilenos sino de muchos latinoamericanos que se encontraban en nuestro país al momento del golpe militar"
Díaz rescató el significado del filme para las nuevas generaciones "para que, después de 33 años, conozcan la brutalidad del golpe militar en nuestro país, que ni siquiera respetó a la gente que se asilaba en la embajada, acto consagrado en la Declaración Universal de los Derechos del Hombre".
Díaz considera que la película es "un registro muy relevante para la historia" porque es "la mejor manera de sensibilizar a los que hasta hoy se niegan a creer por qué sucedieron las cosas". La activista confía en la rigurosidad de la producción internacional "que ha tratado de retroceder en el tiempo buscando todo para que la gente conozca lo que pasó".
La obra tiene el patrocinio del Ministerio de Cultura y las Artes, y el apoyo de la Intendencia Metropolitana, de las carteras de Transportes y de Relaciones Exteriores y del Instituto Nacional de Deportes de Chile, entre otras entidades.
Horacio Donoso, productor de Umana Films, dijo a IPS que, pese a solicitar el apoyo logístico al Ministerio de Defensa, éste "no puso su infraestructura a disposición de la producción". El ejército sólo entregó "asesoría en vestuario y autorizó los fuegos artificiales en el frontis del Palacio de La Moneda".
Donoso, quien nació cinco años después del golpe militar, dijo conocer muy bien ese trozo de la historia chilena. "Este tipo de película, que trata lo que ocurrió con la crisis política del año 1973, es un elemento que contribuye a establecer conciencia colectiva respecto de que nunca más pueda ocurrir algo así en Chile".
El actor sueco Michael Nyqvist encarna a Edelstam, y la mexicana Lumi Cavazos, protagonista de "Como agua para chocolate", es Miria Contreras, la secretaria personal del entonces presidente chileno Salvador Allende (1970-1973) quien se quitó la vida en La Moneda, resistiendo la embestida de las Fuerzas Armadas.
Nyqvist comentó que como parte de su preparación, se reunió con la familia del diplomáticoe "incluso con varios chilenos exiliados en Suecia y que él salvó desde su embajada".
En las tomas dentro del Estadio Nacional, Hultberg comentó que "los espíritus de los muertos estaban con nosotros". Dijo que "poder filmar en La Moneda, con destrucción al frente de ella, y también en el Estadio Nacional, es un evento especial e histórico".
El chileno Cristián Campos, en el rol del coronel Jorge Espinoza, nombre ficticio de quien estuvo a cargo del Estadio Nacional en 1973, señaló "es una labor ardua tratar de encajar con la psicología de algo tan bestial y cruel respecto de sus propios hermanos".
Las imágenes serán enviadas a un laboratorio en Dinamarca para trabajarlas digitalmente con archivos fílmicos y fotos de época. Tras un año de postproducción, el filme se estrenará en Europa en el segundo semestre de 2007.
Durante tres meses de intensa actividad a favor de los perseguidos por la dictadura, Edelstam logró sacar de Chile a más de 1.300 personas, incluidos el cuerpo diplomático de la embajada de Cuba y 54 uruguayos detenidos en el Estadio Nacional.
El embajador sueco, nacido en 1913, concedía salvoconductos, conducía en su propio vehículo a los perseguidos, visitaba refugios y coordinaba con organizaciones internacionales.
"El clavel negro" registrará el episodio en el que Edelstam logró salvar la vida de la ciudadana uruguaya Mirtha Fernández, detenida pese a padecer una grave enfermedad.
Luego que 26 médicos se negaron a atenderla, uno la diagnosticó como en estado de salud "grave". Edelstam acordó con el oficial que custodiaba la embajada que Fernández tendría inmunidad en la clínica y luego regresaría al asilo diplomático.
Una vez en el recinto asistencial, la policía secreta de la dictadura intentó arrestarla por hallarse "en territorio chileno", a lo que el embajador se opuso alegando fuero diplomático. Los policías golpearon a Edelstam y, en medio de las amenazas de repercusiones internacionales, los oficiales se retiraron.
Esa conducta del diplomático despertó la hostilidad de la gobernante Junta Militar que, en diciembre de 1973, lo declaró "persona non grata", obligándolo a abandonar Chile. Igual suerte había corrido en los años 40 cuando, representando a su país ante la Alemania nazi, Adolf Hitler también lo expulsó. Edelstam murió en Estocolmo en 1989.
Tras este filme, el sueco tal vez sea comparado con Oskar Schindler, el industrial alemán que salvó a muchos judíos del holocausto nazi, recordado en el cine por Steven Spielberg en la "Lista de Schindler".
(