ESPECIAL-OMC: Agro francés, el chico malo de Hong Kong

La férrea oposición francesa a una reforma de la política agrícola de la Unión Europea (UE) será uno de las mayores escollos para un acuerdo en la conferencia ministerial de la OMC, que se celebrará en Hong Kong desde este martes.

La negativa francesa a recortar los subsidios agrícolas también será analizada en los próximos días en las discusiones internas del bloque sobre su presupuesto.

Pese a algunos cambios introducidos en la Política Agrícola Común (PAC) europea, los agricultores franceses siguen recibiendo un quinto de los más de 52.000 millones de dólares al año que el bloque concede en subsidios a sus productores.

Estas subvenciones representan casi 40 por ciento del presupuesto total de la UE.

Los ministros de Comercio de la OMC buscarán en Hong Kong, del 13 al 18 de este mes, un acuerdo sobre liberalización del comercio agrícola, acceso a mercados y servicios.
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Pero el éxito de la conferencia dependerá de la disposición de los países ricos, en especial la UE y Estados Unidos, a recortar sus subsidios agrícolas y abrir sus mercados a productos y servicios de las naciones en desarrollo.

Pese a la presión de otros países europeos, en especial de Gran Bretaña, funcionarios franceses subrayaron en los últimos días que no aceptarían ningún tipo de reducción de los subsidios agrícolas ni de los aranceles a los productos del Sur.

"La PAC es una política estratégica europea, y su importancia va más allá del dominio agrícola en sí", señaló el ministro de Agricultura de Francia, Dominique Bussereau, en un editorial del diario financiero Les Echos, publicado la semana pasada.

"Algunos críticos de la PAC dicen que la defensa del gobierno francés es sólo una táctica electoral, y que la ayuda a los granjeros es injusta. Esta forma de pensar es errónea. Francia estará atenta a que el resultado final de la conferencia sea por completo compatible con la PAC", añadió.

Bussereau advirtió en conferencia de prensa que Francia rechazará en Hong Kong todas las concesiones que eventualmente haga el comisario de Comercio Exterior de la UE, Peter Mandelson.

Mandelson propuso un recorte de 70 por ciento en los subsidios agrícolas y una reducción de los aranceles europeos a los productos agrícolas del Sur de 22,8 a 12,2 por ciento.

El gobierno francés también procura no quedar en el centro de la atención mundial y subraya la postura similar que tienen otras potencias del Norte.

En la XXIII Cumbre África-Francia, celebrada en Bamako, Malí, el 3 y el 4 de este mes, el presidente francés Jacques Chirac exhortó "solemnemente" al gobierno de Estados Unidos a "eliminar todos los subsidios a sus productores de algodón, como lo prometió hacer la UE".

Analistas franceses respaldan a sus líderes y rechazan cualquier reforma de los mercados agrícolas.

"Las propuestas de la OMC son lo más contraproducentes en el ámbito agrícola", dijo a IPS Gérard Le Puill, experto en cuestiones comerciales del diario izquierdista L'Humanité.

"Una política agrícola sustentable debe combinar criterios económicos con otros agrícolas y ecológicos. Pero la OMC solo considera el punto de vista económico y la idea errada de que la competencia es la piedra filosofal para el bienestar", añadió.

Le Puill sostuvo que las propuestas en contra de la PAC hechas en la OMC solo llevarían a la deforestación, al monocultivo y a abusos en la irrigación y el uso de químicos y pesticidas.

Similares argumentos fueron esgrimidos por el analista económico del periódico Le Monde, Éric Le Boucher.

Tras calificar de "tensa" la defensa francesa de los subsidios, el experto sostuvo que el proteccionismo agrícola estaba justificado.

"La agricultura no debe llevarnos a transformar el paisaje en terrenos desolados. La seguridad alimentaria debe ser una prioridad política, pues, de otra manera, las multinacionales de la comida chatarra desestabilizarían la agricultura de los países más pobres", afirmó.

Pero otros expertos franceses critican la posición de su gobierno.

Jean Gabriel Fredet, del semanario Le Nouvel Observateur, sostuvo que Francia libra "su última batalla" por la defensa de los subsidios agrícolas.

Inmediatamente después de la conferencia en Hong Kong, las subvenciones estarán en la agenda de la cumbre de la UE, que se realizará el 15 de este mes en Bruselas y donde se debatirá el presupuesto del bloque.

Gran Bretaña, que ejerce la presidencia rotativa de la UE hasta el 31 de diciembre, recomendó recortes por 28.000 millones de dólares de los gastos propuestos por su antecesor, Luxemburgo.

Funcionarios británicos señalan que los subsidios de la PAC agotan casi la mitad de los recursos europeos, y, por lo tanto, deben recortarse en forma drástica.

En un mensaje por correo electrónico filtrado a la prensa, el embajador británico en Polonia, Charles Crawford, calificó a la PAC de "la más estúpida e inmoral política de subsidios estatales en la historia de la humanidad, más o menos como el comunismo".

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