La Iglesia Católica de España tras dos días de recibir intensas críticas, cedió este jueves a la presión y criticó a Radio Cope, de su propiedad, por haberse burlado del presidente electo de Bolivia, Evo Morales.
Desde el programa que dirige el periodista Federico Jiménez Losantos en Radio Cope, uno de sus colaboradores se hizo pasar por el jefe del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, y conectó telefónicamente con Morales.
En la conversación, el supuesto Zapatero le habló a Morales muy bien del "hermano Hugo (Chávez, presidente de Venezuela) y de Fidel (Castro, mandatario de Cuba)", ofreciéndole su apoyo incondicional y concluyendo su charla con un "¡fuera el imperialismo!".
Apenas enterarse de lo ocurrido, Zapatero, el verdadero, llamó al flamante mandatario electo boliviano, le presentó formalmente disculpas por la afrenta y dialogó con él acerca del futuro. Además, el gobierno español exigió a Cope que también ofreciera sus excusas de modo formal.
"Estamos ante una supuesta broma inaceptable, que contiene una suplantación de la personalidad del presidente del gobierno español y un intento de ridiculizar al presidente electo de un país latinoamericano amigo", señaló el secretario de Estado de Comunicación, Fernando Moraleda, al argumentar en favor del reclamo a la radio católica.
Por su parte, el canciller Miguel Ángel Moratinos citó al nuncio apostólico (embajador del Vaticano), el obispo Manuel Monteiro de Castro, le transmitió las quejas gubernamentales por un hecho que, expresó, perjudica las relaciones y la imagen de España y le solicitó que disponga que Cope no vuelva a realizar actuaciones similares.
La llamada del imitador se realizó el martes, dos días después de que Morales fue elegido en primera vuelta con 54 por ciento de los votos, según datos primarios, como el primer presidente indígena de Bolivia, donde la mayoría de su población es de ese origen.
Ni la nunciatura ni la Conferencia Episcopal de España ni la dirección de la radio involucrada respondieron a las consultas de IPS acerca de cuál es su reacción ante el asunto. En todos los casos reconocieron haber recibido las reclamaciones gubernamentales, pero omitieron cualquier información sobre su posición actual.
Sólo después de que el portavoz de la Conferencia Episcopal Española, Juan Antonio Martínez Camino, hablase con el secretario de estado de Comunicación, Fernando Moraleda, fuentes de esa dependencia estatal informaron de que su interlocutor había calificado de "inaceptable" lo hecho por Cope.
Según comentó el propio Moraleda a los periodistas, Martínez Camino indicó que el incidente provocado por Cope "no podía ser considerado como una broma" y que la radio debería pedir disculpas al presidente electo de Bolivia por que la emisora "se ha pasado de la raya".
Las fuentes próximas a Moraleda señalaron que éste insistió ante Martínez Camino para que Cope presente disculpas a Morales y destacaron como un hecho negativo que dos días después de destapado el escándalo todavía continúe la "broma" en la página web de esa radio.
La radio no presentó disculpas aún a Morales. El director general de Cope, Genaro González del Hierro, escribió al embajador boliviano en España, Álvaro del Pozo, indicando que siente "las molestias que la referida broma han podido causar" e informó de que "ya se les ha comunicado a los referidos humoristas la inconveniencia de este tipo de actuaciones".
Según el embajador Del Pozo, la carta de González del Hierro no satisfizo al gobierno de su país ni a la sociedad boliviana, por lo que espera recibir de Cope "una disculpa explícita" dirigida a su presidente electo y al pueblo boliviano "reflejando la magnitud del hecho".
La Federación de Asociaciones de la Prensa Española (FAPE), que agrupa a los profesionales del sector, emitió un comunicado disculpando a Jiménez Losantos.
Según el comunicado de la FAPE, la llamada fue hecha el martes por un grupo de humoristas, lo que "no tiene nada que ver con el ejercicio del periodismo", ya que "pertenece al entretenimiento y se ampara en un derecho a la crítica, a la sátira".
A continuación advierte de que utilizar esos recursos como material informativo no se ajusta a la buena práctica del periodismo y aclara que quienes consideren sus derechos lesionados por esas prácticas "siempre tienen abierto el recurso a los tribunales de justicia".
Por el contrario, Fernando Jáuregui, periodista y analista de Televisión Española, columnista del diario local ABC, director de "Conficrítico" y miembro de la directiva del Club Internacional de Prensa, dijo a IPS que lo realizado por COPE es un delito de suplantación de personalidad, "delito gravísimo contemplado como tal en el Código Penal".
Hacer lo que se hizo desde la radio Cope, añadió Jáuregui, viola la ética profesional del periodismo de arriba abajo, pues "se rieron del presidente electo, lo trataron con indignidad periodística y profesional".
COPE, una de las radios con mayor audiencia en España, es propiedad de la Iglesia Católica en su totalidad, ya que la Conferencia Episcopal posee 51 por ciento de las acciones y el resto se lo repartan diócesis, órdenes como los domínicos y jesuitas y otras.
La mayor responsabilidad recae en la Conferencia Episcopal, ya que dispone de la mayoría necesaria para nombrar y destituir directivos de la radio, así como para influir en su orientación.
Jiménez Losantos, un periodista de larga trayectoria, en la actualidad dirige el programa matinal de COPE y escribe como columnista en el madrileño diario El Mundo.
En su juventud fue militante maoísta y posteriormente fue cambiando su posición hasta ubicarse en la actualidad en la derecha, habiendo sido a principios de los años 80 candidato a diputado por el Partido Socialista de Andalucía.
A los pedidos gubernamentales de que presente disculpas, Jiménez Losantos sólo aclaró que la "broma" hecha a Morales fue similar a la que tiempo atrás hicieron al presidente a Chávez humoristas de una emisora de Miami.
Portavoces autorizados del gobernante Partido Socialista Obrero Español (PSOE) calificaron de irresponsable e inaceptable el acto producido desde el programa que dirige Jiménez Losantos. Porque, puntualizaron, "suplantar la personalidad del presidente del gobierno para engañar a un presidente democrático de una nación como Bolivia es, además, un delito muy grave".
Además, añadieron que "Lo más grave es que no estamos ante un hecho aislado que pueda considerarse un error o un desliz. Los distintos locutores de COPE han estado durante todo el día vanagloriándose de la comisión de ese delito y ridiculizando al presidente boliviano".
La "broma", además de poner contra la pared a COPE, a Jiménez Losantos y a la Conferencia Episcopal española, produjo un mayor acercamiento entre Morales y Zapatero.
El jefe del gobierno español, apenas producido el hecho, llamó al presidente electo de Bolivia para presentarle disculpas ûaunque no tuviese culpa alguna en lo que ocurrió¡ e invitarlo formalmente a visitar a España, "en el día y hora que usted fije", le dijo.
Aunque en La Paz, el gobierno boliviano también citó al embajador español para transmitirle su desagrado, fuentes diplomáticas de ambos países confirmaron que la "broma" no afectará a sus relaciones.