El Foro Humano que finalizó este sábado en Puerto Rico marginó todo lo que oliera a altermundismo y contradicciones entre ricos y pobres. La fórmula para un mundo mejor radica en trabajar con amor y comprensión e impulsar la conexión de quienes persigan ese propósito, afirmaron los participantes.
"Ya es hora de que los conceptos Norte-Sur queden fuera. Cuando el trabajo social se politiza no incide en los cambios y se pierde credibilidad. Hay que unirse y no confrontarse", dijo a IPS Andrés Botrán, secretario de la Presidencia de Guatemala en Seguridad Alimentaria y miembro de la Junta de la no gubernamental Alianza para la Nueva Humanidad.
En las sesiones de la cita, organizada por esa Alianza en un lujoso hotel rodeado de playas, prevalecieron las referencias a la unión espiritual, la paz, el amor y el trabajo compartido.
En las presentaciones, la música de fondo era new age, y varias veces se escuchó la canción "Imagine" del fallecido músico británico John Lennon. Además, algunos asistentes realizaron jornadas de meditación.
Hubo un desequilibrio en la cita de tres días, pues "la parte espiritual estuvo muy presente y la social no", dijo a IPS el ítalo-argentino Roberto Savio, experto en medios de comunicación y uno de los fundadores de la Alianza para la Nueva Humanidad, iniciativa que busca crear una corriente internacional que impulse la justicia global.
La Alianza fue creada en 2003 con la participación, entre otros, del ex presidente de Costa Rica y premio Nobel de la Paz, Oscar Arias (1986-1990), y el escritor, gurú y médico indio-estadounidense Deepak Chopra.
"Es cierto que mucha gente del mundo cree que los problemas se tratan de amor y paz, pero nosotros pensamos que si eso no se une a una acción política no vamos a ningún lado", sostuvo Savio.
La Alianza tiene como principales líderes a Chopra, cuyos exitosos libros y enseñanzas sobre desarrollo espiritual y salud siguen artistas de Hollywood y cantantes famosos, y al ex presidente de Costa Rica, dedicado a trabajar cuestiones de gobernanza, desarrollo y derechos humanos.
Arias no asistió a la cita de Puerto Rico. Según algunos participantes consultados por IPS, eso inclinó la balanza hacia las posiciones de Chopra y a una presencia mayoritaria de organizaciones filantrópicas, de líderes empresariales y sociales de los países del Norte industrial, especialmente de Estados Unidos.
"Aunque sigue siendo válido abordar los problemas Norte y Sur, creo que podemos solucionar mucho de la pobreza e implantar la paz si la gente y la organizaciones con dinero apoyan, por eso estoy aquí" dijo a IPS el español Luis Miguel Rico, quien dirige en Puerto Rico Hacienda Verde, un proyecto de desarrollo ambiental.
Entre los más de 300 asistentes al Foro Humano, 30 organizaciones sociales, ambientales, productivas y filantrópicas de diferentes países expusieron su trabajo en un lugar que denominaron Plaza de la Convergencia Humana, entre ellas Hacienda Verde. Se trató de una instalación con varios cubículos, levantada en un salón en cuyo centro había un escenario pintado de blanco.
"Lo que queremos con el Foro es cerrar brechas de pensamiento y propósitos con el mundo desarrollado, y algunos buscamos por eso el apoyo de la gente que tiene dinero", expresó Rico.
Para María Pacheco, quien lidera Kiej de los Bosques, empresa privada que trabaja junto a campesinos de Guatemala en proyectos productivos, "juntar al mundo rico y al Sur en desarrollo puede generar cosas increíbles".
"Aquí (en Puerto Rico) hemos venido a conectarnos y a unirnos con otros, pues en la medida en que trabajemos juntos, ya no viéndonos como Norte y Sur sino sólo como seres humanos, podremos cambiar el rumbo del planeta, que ahora asusta", señaló a IPS.
Al ser consultados sobre el valor de otras iniciativas mundiales, como el Foro Social Mundial (FSM) de Porto Alegre, un ámbito de reflexión crítica sobre la actual globalización y sobre iniciativas políticas para construir un mundo mejor, varios participantes señalaron respetar ese espacio pero no compartirlo.
"Nosotros queremos un mundo mejor, pero con armonía y sin enfrentamientos o luchas de clases y pugnas políticas. Creemos que la única forma de hacerlo es cambiando primero por dentro a cada persona y luego uniéndonos todos en el mismo propósito", declaró un participante del Foro quien prefirió no dar su nombre "para que luego no me estigmaticen".
A diferencia del FSM, donde prevalece un abrumador rechazo a la política exterior de Estados Unidos, en el Foro Humano casi nadie criticó a ese país.
Entres los asistentes a la cita estuvieron Omar Amanat, un exitoso empresario financiero de Wall Street, Michael Karlin, presidente del Instituto de Imaginación Mítica y fundador de un banco en la red Internet, y Jacqueline Novogratz, ejecutiva de Acumen Fund, una organización estadounidense que ofrece apoyo financiero a proyectos de lucha contra la pobreza.
También asistieron el economista estadounidense Jeremy Rifkin, presidente de la Fundación sobre Tendencias Económicas y autor de libros de gran repercusión como "La tercera ola" y "El fin del trabajo", Dalia Mogahed, consultora de la firma de estudios de opinión Gallup, Ray Hanania, fundador del grupo de artistas "Comedy for Peace" dedicado a promover el entendimiento de palestinos e israelíes a través del humor, y Jeffrey Dunn, ex presidente de la corporación Coca-Cola.
"Lo más importante hoy es entrelazar a quienes se sienten que debemos generar una nueva narrativa y crear un mundo donde prevalezca la esperanza, la justicia social, la paz y el sentido sagrado de la vida", señalan documentos del Foro Humano, convocado bajo el lema "El poder de la 'unicidad', conectando las semillas de la nueva humanidad".
En la cita, Chopra intervino en varias ocasiones y exhortó a "soñar con una nueva humanidad" y a hacer de ello una realidad.
"Si su intención es transformarse a sí mismos para así transformar al mundo, levántense de sus asientos", señaló en una de sus intervenciones. Todos los asistentes se pusieron de pie.