El secretario general de la ONU, Kofi Annan, no debe conducir el foro mundial como si fuera el director ejecutivo de una multinacional, advirtió el presidente del Grupo de los 77 (G-77), principal expresión del Sur en desarrollo en la comunidad internacional.
El embajador de Jamaica Stafford Neil se refirió así, en una reunión del G-77 a puertas cerradas, la discrepancia del bloque con la reforma de la ONU (Organización de las Naciones Unidas) propuesta por Annan a comienzos de este año.
La iniciativa de Annan incluye la creación de una Oficina de Ética y de un Comité Independiente de Control para impedir fraudes y otros actos de corrupción, y coincidió con el escándalo por el manejo de los fondos del programa humanitario para Iraq denominado Petróleo por Alimentos.
El secretario general del foro también planea establecer una Unidad de Derecho en la Secretaría General, así como evaluar la relevancia de varios comités y organismos de la ONU, cuya utilidad ha cuestionado.
Pero el presidente del G-77, hablando en nombre de los 132 países en desarrollo que lo integran y de China, puso en duda la necesidad de que la ONU incorpore una nueva burocracia de abogados.
Neil también acusó implícitamente a la Secretaría General de intentar pasar en su reforma por encima del Quinto Comité de la ONU, que considera asuntos administrativos y presupuestarios, y del Comité Asesor sobre Cuestiones Administrativas y Presupuestales.
Estos comités son los más poderosos de la organización, pues evalúan cada asunto presupuestal y deciden la extinción o supervivencia de los programas.
En la reunión reservada del G-77, realizada la semana pasada y a cuyos resultados accedió IPS, Neil dijo a los delegados que se le debe decir a Annan con claridad que su tarea no es la de un director ejecutivo y que la ONU no puede ser conducida como una corporación multinacional o estadounidense.
"La ONU está compuesta por 191 miembros, y todos nosotros tenemos derecho a participar en cómo es dirigida", opinó el diplomático.
Creado el 15 de junio de 1964 en Ginebra, el G-77 está integrado hoy por 132 países en desarrollo y coordina sus actividades con China en todo el sistema de Naciones Unidas.
En una carta a Jan Eliasson, presidente de la Asamblea General, Neil observó que los países miembros de la ONU tienen que participar en la creación de cualquier nuevo organismo, y que esa eventualidad también depende de "implicaciones presupuestarias".
"La Secretaría debería ejercitar la precaución al tratar asuntos tan delicados, lo que podría ser considerado como una intervención en el proceso intergubernamental", agregó.
Neil afirmó que la decisión de Annan de continuar con el proceso de crear una Oficina de Ética "despierta serias preocupaciones", pues se desvía del acuerdo alcanzado en la Cumbre Mundial celebrada del 14 al 16 de septiembre en la sede de la ONU en Nueva York.
"El procedimiento esperado" para la reforma del foro mundial es que sean "presentados ante la Asamblea General para su consideración, de acuerdo con las reglas y los procedimientos existentes", dijo Neil.
Dado que ya existen varios organismos de control en el sistema de las Naciones Unidas, incluidas la Oficina de Servicios de Vigilancia Interna y la Unidad Investigadora Conjunta, la creación de un comité de vigilancia independiente generaría "mandatos superpuestos".
Pero también originaría "más ineficiencia y confusión en las funciones de entidades similares", indicó Neil en su misiva.
Un diplomático asiático dijo a IPS que la idea central de la carta del G-77 es que tanto Annan como la Secretaría General no sólo se están atribuyendo facultades que no les corresponden, sino que también han abreviado los procedimientos establecidos.
Dado que la ONU recientemente estuvo "bajo fuego", particularmente a manos de legisladores, dirigentes políticos y medios de prensa derechistas de Estados Unidos, "la Secretaría está haciendo todo lo posible por hacer un poco de limpieza doméstica".
Y en el proceso, dijo el diplomático, la Secretaría General ha intentado, voluntaria o involuntariamente, asumir tareas que le corresponden a los países miembros, a través de la Asamblea General que los integra a todos.
"El rol de la Secretaría es facilitar la evaluación en todos los órganos de la ONU y no asumirla ella misma, lo que corresponde a la Asamblea General y otros órganos ", dijo.
Como parte de la implementación del documento final de la Cumbre Mundial 2005, está previsto que pronto comiencen las consultas informales del plenario de la Asamblea General sobre reforma administrativa.
En el marco de estas consultas, los estados miembros tendrán la oportunidad de discutir asuntos administrativos, incluidos los planteados en la carta presentada por el G-77 y China, agregó Eliasson.
"Como he declarado en la reunión informal del plenario el 7 de noviembre, el rol del Quinto Comité y del Comité Asesor sobre Cuestiones Administrativas y Presupuestaria es crucial para la consideración de asuntos que caen dentro de sus áreas de competencia", puntualizó.
