La cuestión de las agresiones contra las mujeres y las niñas no está presente en la campaña para las elecciones generales del 11 de diciembre en Chile, se quejaron este viernes organizaciones femeninas, que exhortaron a los candidatos a asumir compromisos explícitos para erradicar este flagelo.
"Ojalá haya una reacción de candidatas y candidatos ante nuestro llamado y que el tema sea colocado efectivamente en el debate electoral", dijo a IPS Gloria Maira, investigadora de la no gubernamental Corporación Humanas, a raíz del emplazamiento hecho en el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.
La Red Chilena contra la Violencia Doméstica y Sexual destacó que por lo menos 40 mujeres han sido asesinadas este año en Chile, como consecuencia de la falta de condiciones efectivas de protección ante actos y acciones que configuran feminicidios. "El Estado falló en defender su derecho a la vida", señaló una declaración.
La conmemoración de la fecha instituida en 1999 por la Organización de Naciones Unidas (ONU) dio lugar en la noche de la víspera a marchas callejeras en Santiago, Valparaíso, Concepción, Antofagasta, Valdivia y Temuco, las mayores ciudades de Chile, que culminaron con actos de vigilia en plazas públicas.
"En Santiago, de acuerdo a informes de la propia Policía de Carabineros, la marcha reunió a unas 3.000 personas. Estamos muy contentas con el éxito de nuestra convocatoria, porque nos vieron y estamos sacando el tema de la violencia de la invisibilidad", dijo Maira, economista y experta en derechos de las mujeres.
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La dirigente destacó que hubo también hombres en la marcha, aunque la gran mayoría fueron mujeres que desfilaron vestidas de blanco y portando antorchas por las 12 cuadras que separan a la tradicional Plaza Italia del palacio de gobierno de La Moneda.
"Hubo mujeres de sindicatos, trabajadoras del comercio, profesionales, estudiantes. Estuvieron las redes de La Pintana y otras poblaciones (barriadas populares), así como las trabajadoras sexuales y los colectivos de la diversidad sexual. Fue una convocatoria muy amplia", subrayó Maira.
El Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer fue instaurado por la ONU en memoria de las hermanas Patria, Minerva y María Teresa Mirabal, activistas demócratas de República Dominicana brutalmente asesinadas el 25 de noviembre de 1961 por orden del entonces dictador Rafael Leonidas Trujillo.
A más de 40 años de esa tragedia, la violencia con base en la discriminación de género continúa vigente en Chile y en todo el mundo, con crecientes tasas de feminicidio, como se denomina a los crímenes que "castigan" a las mujeres por su condición de tales.
El gubernamental Servicio Nacional de la Mujer, organismo de rango ministerial, estableció a través de una investigación que 50 por ciento de las chilenas confiesan haber sido golpeadas, que cuatro de cada 10 mujeres sufren maltrato psicológico y que entre 25 y 32 por ciento han sido agredidas a puntapiés, arrastradas o recibido golpizas.
En cuatro regiones del país, incluyendo a la Metropolitana (Santiago), la agresión más recurrente es de carácter psicológico, mientras que la violencia sexual afecta entre 14,2 y 16,6 por ciento de las mujeres y niñas consideradas en la investigación.
Por cada 10 encuestadas, se consignan entre siete a ocho casos de mujeres que en algún momento fueron forzadas a tener relaciones sexuales.
Verónica Aravena, una mujer no vidente de 43 años, casada, sin hijos, que preside la Red de Mujeres del municipio de Pedro Aguirre Cerda, en el sector sur de Santiago, dijo a IPS que en su organización hay numerosas amas de casa y niñas maltratadas.
"Nos constituimos como red porque somos organizaciones que queríamos trabajar el tema de la discriminación de las mujeres en la comuna (municipio), porque este es un problema que no se asume a nivel público, ni siquiera en la municipalidad o en los servicios de salud", señaló Aravena.
El activismo de esta red comprende pintado de murales, manifestaciones artísticas en parques y actos públicos sobre todo en las ferias (mercados que se instalan en las calles), para llamar la atención sobre la violencia doméstica.
"Algunos hombres no nos pescan (nos ignoran), pero generalmente hay respeto por nuestras acciones. Creo que en la comuna hemos ido ganando el respeto de los hombres hacia lo que nosotras hacemos, porque no estamos en contra de ellos, ya que el problema de la violencia nos compromete a todos", explicó la presidenta de la red.
"El problema del maltrato a la mujer en Chile es de todas y de todos", corroboró Maira, quien exhortó a los candidatos para las próximas elecciones a que lo asuman como un fenómeno de una gravedad comparable a la de la corrupción o la desigualdad social.
El 11 de diciembre se elegirá en Chile a la presidenta o presidente que el 11 de marzo de 2006 reemplazará al actual gobernante, Ricardo Lagos. Igualmente, se renovarán por completo los 120 escaños de la Cámara de Diputados y 20 de los 38 cargos del Senado.
La favorita según los sondeos de intención de voto para ganar los comicios presidenciales es la médica pediatra Michelle Bachelet, socialista igual que Lagos y candidata por la coalición de centroizquierda que gobierna este país desde marzo de 1990, cuando finalizó la dictadura del general Augusto Pinochet.
Bajo el régimen militar instalado por el cruento golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973 comenzaron las manifestaciones de grupos de mujeres con demandas de "democracia en el país y en la casa", recordó Soledad Rojas, dirigente de la Red Chilena contra la Violencia Doméstica y Sexual.
Este colectivo de organizaciones feministas y de mujeres reconoció avances en Chile desde la primera ley sobre violencia intrafamiliar promulgada en 1994 y que fue actualizada este año con una nueva ley que tipifica como delito, y no como simple falta, las agresiones en el hogar y que creó los Tribunales de Familia.
No obstante estos y otros adelantos, la red manifestó su preocupación por "el bajo nivel de institucionalización que han alcanzado las políticas de atención a la violencia contra las mujeres", a lo cual se suma la falta de información y los bajos recursos financieros y humanos asignados a los organismos que actúan en este ámbito.
"La ausencia de la violencia contra las mujeres y las niñas en el debate electoral sobre delincuencia y seguridad ciudadana" demuestra una falta de compromiso de los políticos con este asunto, indicaron las organizaciones de mujeres.
Para los candidatos y políticos "de todas las tintas", el robo con intimidación pareciera ser el único problema de seguridad con connotación social, agregaron.
"La violencia contra las mujeres, que sólo en el espacio doméstico afecta por lo menos a 100.000 mujeres al año, no concita la misma preocupación", advirtió la red.
"No basta colocar rostros de mujeres en la franja (de propaganda) electoral, sin pronunciarse sobre la inferiorización (sic) de las mujeres, que muchas veces los propios discursos electorales refuerzan con ofertores (promesas) para 'la reina del hogar'", agrega.
"Después de 20 años de movilizaciones de las mujeres contra la violencia es hora de una respuesta más contundente del Estado chileno y de la sociedad civil", puntualizó Gloria Maira a IPS.
