El gobierno de Estados Unidos anuló la visa del presidente del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela (TSJ), Omar Mora, lo que el magistrado vinculó con la demanda de Caracas a Washington para que extradite al terrorista de origen cubano Luis Posada Carriles.
No quisiera atribuirlo al hecho de que la Sala Penal del TSJ haya solicitado la extradición del terrorista Posada Carriles, implicado en la voladura (estallido) del avión cubano, dijo Mora al informar este jueves de la suspensión de su visa. Pero llama la atención que lo haga una vez que se aprobó esa solicitud, agregó.
Posada Carriles, de 77 años, fue juzgado en Venezuela hace dos décadas como planificador del atentado con bomba contra un avión civil cubano que estalló en pleno vuelo, sobre aguas del mar Caribe, el 6 de octubre de 1976. Murieron los 73 ocupantes de la aeronave, en su mayoría jóvenes deportistas.
En 1985, Posada Carriles escapó de una prisión venezolana, mientras esperaba sentencia. Vivió en América Central, y en 1997 organizó un ataque a un hotel en La Habana, en el que murió un ciudadano italiano.
Documentos desclasificados este mes en Estados Unidos expusieron los vínculos entre Posada Carriles y la estadounidense Agencia Central de Inteligencia (CIA).
Fue detenido en Panamá en 2000 por organizar un atentado contra el presidente cubano Fidel Castro, en el marco de una cumbre iberoamericana. Indultado el pasado septiembre, Posada Carriles apareció a fines de marzo en Estados Unidos, donde solicitó asilo político el 12 de abril. El 17 de este mes fue detenido por autoridades migratorias estadounidenses por haber ingresado ilegalmente al país.
Mora reclamó un trato digno para el presidente del TSJ, y exigió que la embajada estadounidense en Caracas, cuyo titular William Brownfield está de viaje, diga que oficialmente mi visa fue cancelada, pues se enteró mediante un correo electrónico que le informó de algún defecto en su pasaporte.
El magistrado mostró ese documento sobre el cual hay una visa estadounidense fechada en febrero de 2000, con diez años de validez, y la cual dijo que empleó dos veces sin problemas, en febrero de 2000 y mayo de 2002, para visitar Estados Unidos.
Es una afrenta al poder judicial venezolano. No hay razón legal ni ética para cancelar esta visa, insistió Mora, de 55 años, quien en sus años de estudiante militó en la Juventud Comunista, fue luego abogado laboral, simpatiza con el proceso que lidera el presidente Hugo Chávez y se define de izquierda hasta la muerte.
Venezuela no sólo exige la extradición de Posada Carriles. Chávez anunció que si Estados Unidos no lo entrega colocaremos en revisión integral las relaciones, y si vale la pena tener una embajada abierta allá y ellos una acá. Es muy difícil tener relaciones diplomáticas así.
Analistas políticos en ambos países coinciden en que la situación de Posada Carriles es una dura prueba para el gobierno de George W. Bush, porque lo coloca contra la pared, entre su discurso antiterrorista y su lealtad con un ex agente de la CIA que combatió al régimen de Castro.
Estados Unidos no sólo debería rechazar el asilo a Posada, sino que debería devolverlo a Venezuela (à) Muchas víctimas inocentes que resultaron ser cubanos murieron en las manos de Posada, en un crimen semejante al que mató a víctimas inocentes estadounidenses el 11 de septiembre de 2001, dijeron en una carta a Bush, una semana atrás, 20 legisladores estadounidenses del opositor Partido Demócrata.
En La Habana, Castro encabezó una marcha de centenares de miles de personas que reclamaron la extradición de Posada Carriles a Venezuela, y las fuerzas oficialistas venezolanas preparan una manifestación con ese mismo propósito para este sábado.
Como Posada Carriles está detenido en El Paso, Texas (fronterizo con México) y se presume que ingresó desde ese país vecino, una de las opciones que analiza Washington es su posible expulsión, incluso hacia la nación fronteriza, dependiendo de lo que decida un tribunal que el 13 de junio examinará su ingreso ilegal a Estados Unidos.
El canciller mexicano Luis Ernesto Derbez dijo el miércoles que si Estados Unidos entrega a Posada Carriles a su gobierno, éste lo devolvería a Venezuela. Él tendría que ir a Venezuela porque el caso venezolano es muy claro, hay un crimen, dijo Derbez.
Entretanto, el presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular (parlamento) de Cuba, Ricardo Alarcón, dijo en Caracas que su país no tiene interés en juzgar a Posada Carriles y que si Estados Unidos no lo extradita a Venezuela, tendría entonces que juzgarlo como si hubieran sido americanos (estadounidenses) las víctimas.
Tendrían que castigarlo con la severidad que ellos imponen a las personas con nombres árabes o musulmanes. Imagínense que estamos hablando de Luis Bin Posada o de Osama Posada Carriles, comentó Alarcón a periodistas en alusión al prófugo saudita Osama bin Laden, al que Washington atribuye autoría de los ataques del 11 de septiembre de 2001.
Aunque el avión derribado en 1976 era cubano, como la mayoría de las víctimas, el atentado ocurrió en el espacio aéreo de Barbados y los autores materiales fueron capturados en Trinidad y Tobago, un acuerdo entre las respectivas cancillerías radicó el juicio en Venezuela.
Como organizadores fueron procesados Posada Carriles y el anticastrista cubano Orlando Bosch, ambos entonces radicados en Caracas, y como perpetradores fueron condenados dos fotógrafos venezolanos, Freddy Lugo y Hernán Ricardo, quienes ya purgaron una pena de 12 años de cárcel.
El expediente, con el pedido del TSJ para su extradición, está aún en fase de traducción al inglés para remitirlo a las autoridades estadounidenses, admitió el canciller venezolano Alí Rodríguez.
El secretario de Estado adjunto para Asuntos del Hemisferio Occidental, Roger Noriega, acusó este jueves a Venezuela de falta de seriedad.
Desafortunadamente, ha habido protestas, declaraciones, comunicados de prensa, en vez de trabajo serio sobre el tema, dijo Noriega. Es muy peligroso cuando ellos (los venezolanos) hablan en esos términos, porque las palabras son importantes e indican una falta de seriedad por las personas que hablan sin fundamentos, agregó.
Tenemos que tratar este tema sensible en un foro diplomático y no mediante comunicados de prensa, insistió Noriega al asistir en Washington a la investidura del chileno José Miguel Insulza como nuevo secretario general de la Organización de Estados Americanos.
El miércoles, el vicepresidente venezolano José Vicente Rangel lamentó que Estados Unidos enfatizara el carácter legal del caso para ocultar su connotación política. Es una manera inmoral de rehuir, con falta de argumentos, la verdad.
En una reunión con empresarios este jueves, mientras Mora daba cuenta de la anulación de su visa, Chávez dijo que nosotros no tenemos ningún plan para dañar las relaciones con Estados Unidos, son ellos los culpables del desgaste, y quisiéramos recuperar unas relaciones normales de respeto.
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