El gobierno de Rusia buscará apoyo del sector privado para llevar adelante una intensa campaña de lucha contra el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (sida).
La decisión fue tomada luego de que expertos confirmaran que hay más de 312.000 personas con VIH (virus de inmunodeficiencia adquirida, causante del sida) registradas en todo este país de 104 millones de habitantes, aunque se estima que el número real de los infectados llegaría al millón.
Los números superaron todos los pronósticos. La propagación del sida ya dejó de ser sólo un problema médico, y ahora es también un problema estratégico, social y de seguridad económica ante la actual situación demográfica, afirmó el viceprimer ministro Alexander Zhukov, en referencia a la merma en la población rusa registrada en los últimos años.
El Banco Mundial pronosticó que el producto interno bruto de Rusia caerá cuatro por ciento para 2010 como consecuencia de la disminución de la población económicamente activa, entre otras cosas debida a la gran propagación del VIH/sida.
Zhukov señaló que el gobierno del presidente Vladimir Putin ahora entiende la escala e importancia de este problema y se da cuenta de la necesidad de prevenir el desarrollo descontrolado de la epidemia.
Las compañías farmacéuticas pueden jugar un papel clave en esta nueva sociedad entre el gobierno y el sector privado para luchar contra el sida, añadió.
El viceprimer ministro sugirió que las farmacéuticas podrían tomar el liderazgo de las investigaciones para el desarrollo de medicinas antirretrovirales y de una vacuna contra la enfermedad.
Además, indicó que podrían patrocinar programas de prevención y educación, así como campañas para combatir la discriminación que sufren muchos enfermos a la hora de acceder a atención médica.
Por su parte, el ministro de Salud, Mikhail Zurabov, anunció este mes acuerdos con importantes firmas farmacéuticas internacionales que le permitirán a los rusos infectados con VIH pagar menos por sus medicamentos.
Zurabov subrayó que, antes, un paciente debía gastar por lo menos 10.000 dólares al año en medicinas, y ahora invertirá sólo 3.000.
La dispersión del virus alcanzó un nivel crítico. Cien personas se infectan todos los días. Onusida (Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/Sida) estima que actualmente viven en el país unas 860.000 personas con VIH, y que la propagación de la enfermedad en Rusia es la más rápida del mundo, dijo el director del Centro Federal contra el Sida, Vadim Pokrovsky.
El consultor médico internacional César Chelala sostuvo que el gobierno ruso debe cuanto antes incrementar sus actuales niveles de financiación para campañas de prevención y tratamiento.
El gobierno de Putin destinó unos cuatro millones de dólares para luchar contra el VIH/Sida en 2003, una suma casi insignificante comparada con los 1.300 millones de dólares que volcó para las celebraciones de los 300 años de la occidental ciudad de San Petersburgo, indicó Chelala a IPS.
El VIH/sida ha alcanzado proporciones siniestras en Rusia, lo que tendrá graves consecuencias en la expectativa de vida y en el crecimiento demográfico. A menos que se pongan en práctica medidas efectivas de tratamiento y prevención, el efecto en la población de Rusia y en su desarrollo económico será catastrófico, alertó.
El experto señaló que la propagación del sida ha ido acompañada con el aumento de otras enfermedades de transmisión sexual. La prevalencia de sífilis en Rusia es cientos de veces más alta que en Europa occidental.
El gobierno ya encomendó estudios sobre el papel que podrían asumir las compañías farmacéuticas en la lucha contra el sida, como la financiación de programas de prevención y el apoyo a organizaciones civiles.
Una investigación realizada por la organización no gubernamental internacional Socios Transatlánticos Contra el Sida, concluyó también que la campaña contra la enfermedad en Rusia necesita del respaldo del sector privado.
El estudio demostró que gerentes de 137 empresas no tenían información básica sobre el VIH/sida ni mucho menos políticas para prevenir a sus empleados.
Es clave que el gobierno ruso, la comunidad empresarial y el público en general trabajen juntos para identificar y poner en práctica soluciones efectivas al problema del sida, dijo a IPS el presidente de Socios Transatlánticos Contra el Sida, John Tedstrom.