Los gobiernos de Cuba y de Venezuela fortalecieron su alianza estratégica con importantes acuerdos de intercambio en diversas áreas, en medio de expresiones de preocupación de Washington por presuntas «actividades desestabilizadoras de Caracas.
Los convenios de cooperación en materia de salud, educación y energía firmados este jueves en La Habana dan seguimiento al suscripto a fines del año pasado por los dos países para la aplicación de la denominada Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA).
El ALBA es una iniciativa de integración lanzada por el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, como alternativa al Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA) impulsada por Estados Unidos.
Chávez llegó la noche del miércoles a Cuba para una estadía de dos días y entrevistarse con su par anfitrión, Fidel Castro, quien considera al visitante un amigo, hermano y compatriota latinoamericano.
La prensa escrita y de televisión cubana mostraron este jueves imágenes de la llegada de Chávez, quien descendió del avión con su pequeño nieto en brazos y, sin soltarlo, saludó a Castro con un abrazo.
Hacia el mediodía, ambos estadistas caminaron por calles adoquinadas del casco histórico de La Habana Vieja para inaugurar una oficina de la firma estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa) que operará desde Cuba hacia el Caribe mediante un proyecto denominado Petrocaribe.
En el recorrido participó además el jeque Abdullah Bin Hamad Al-Attiyah, ministro de Petróleo de Qatar, quien se encuentra en esta nación caribeña desde el miércoles.
Rafael Ramírez, ministro de Energía de Venezuela y también presidente de Pdvsa, dijo a los periodistas, que la región caribeña, un mercado natural para el crudo de su país, se recuperó de manos de terceros y ahora se atenderá directamente.
La llegada de Chávez fue precedida de la apertura de una exposición de productos que unos 200 pequeños y medianos empresarios venezolanos podrán exportar a Cuba, cuyo gobierno está interesado en ampliar su oferta de alimentos y bienes en el mercado interno.
La muestra incluyó productos alimenticios en conserva, refrigeradores, cocinas, licuadoras, uniformes, calzado, ropa infantil y artículos deportivos hasta lencería para hoteles y hospitales.
Para incentivar los negocios, los dos gobiernos aportaron un fondo de 200 millones de dólares cada uno. Además, el Banco Industrial de Venezuela abrió una sucursal en La Habana, donde podrá operar desde préstamos para pequeñas empresas hasta la gestión de cartas de créditos.
"Vamos a demostrar lo que es una integración verdaderamente justa, liberadora y en beneficio de los pueblos", dijo Castro el martes, al referirse a los planes de cooperación y el aumento del intercambio entre los dos países.
Comerciantes de la nación sudamericana y ejecutivos cubanos consultados por IPS coincidieron en considerar ventajosa la oportunidad de ampliar los negocios bilaterales.
"Tenemos apoyo de los bancos y de todas las instituciones financieras y creo que eso se va cumplir, porque es algo totalmente serio, dijo Patricio Ricter, directivo de una empresa de calzado para niños.
"Con Venezuela hay un gran proceso de integración y los venezolanos son muy competitivos, tienen interés en desarrollar unas relaciones muy amplias con Cuba, comentó, a su vez, Pedro Álvarez, presidente de Alimport, empresa cubana importadora de alimentos. También se prevé la próxima apertura en Cuba de unos 14 establecimientos Mercal, una red de tiendas estatales instaladas en Venezuela que vende a precios casi 30 ciento por debajo del sistema convencional.
"Este tipo de comercio se creó a raíz de la paralización de actividades de las industrias de alimentos, en diciembre de 2002 (en el marco del cierre comercial y huelga laboral en contra de Chávez), como una forma de asegurar el abastecimiento, explicó Luis Solórzano, gerente general de compras regionales de Mercal.
El directivo, encargado de mostrar la "Misión Mercal en la feria bilateral, aseguró que el sistema constituye para casi 12 millones de personas en Venezuela una garantía de seguridad alimentaria y con productos de calidad.
Según cifras oficiales, el intercambio entre Cuba y Venezuela alcanzó el pasado año unos 1.500 millones de dólares.
Por un acuerdo vigente desde 2000, Venezuela suministra a Cuba 53.000 barriles diarios de petróleo.
El ministro Ramírez indicó que esa cantidad inicial aumentó a 80.000 barriles. Cuba produce unos 90.000 barriles diarios de crudo y consume unos 160.000, según datos cubanos.
En más de una ocasión, el gobierno estadounidense de George W. Bush ha expresado su preocupación por el acercamiento del estadista venezolano a Castro, cuyo gobierno considera totalitario y antidemocrático.
Justo en vísperas del viaje de Chávez a Cuba, la secretaria de Estado (canciller) estadounidense, Condoleezza Rice, de gira por América Latina, identificó la situación de las dos naciones como "puntos negros en un continente "volcado a la democracia.
Este viernes, el mandatario visitante asistirá a un encuentro de lucha contra el ALCA que se realiza en La Habana con asistencia de unos 900 representantes y activistas de 36 países.
Esta es la décimo segunda visita que Chávez realiza a Cuba desde diciembre de 1994.