El chileno José Miguel Insulza será elegido este lunes secretario general de la OEA, luego de que su único competidor, el mexicano Luis Ernesto Derbez, anunciara este viernes su retiro, que se atribuyó a una operación de la secretaria de Estado (canciller) estadounidense, Condoleezza Rice.
Insulza, un socialista moderado y actual ministro del Interior del gobierno del presidente Ricardo Lagos, compitió con Derbez, canciller de México, en la elección realizada el 11 de este mes en la sede de la OEA (Organización de Estados Americanos) en Washington, y se registraron cinco empates consecutivos, con 17 votos cada uno.
El desistimiento del mexicano se produjo en Santiago, en el marco de la III Cumbre Ministerial de la Comunidad de las Democracias, que reunió el jueves y este viernes en la capital chilena a un centenar de cancilleres, incluyendo a Rice y a sus pares de la mayoría de los 34 países integrantes de la OEA, todos los de América a excepción de Cuba, suspendida desde 1962.
Fue la canciller de Colombia, Carolina Barco, quien anunció el abandono de Derbez en una rueda de prensa, luego de que el ministro mexicano sostuviera una extensa reunión privada con la secretaria de Estado estadounidense, quien había trabajado arduamente por su candidatura para la primera elección.
El retiro de Derbez causó cierta sorpresa, ya que al llegar a Santiago en las primeras horas de este viernes declaró que mantenía a firme su postulación, y sugirió que si este lunes persistía el empate con Insulza podría surgir como alternativa de consenso la candidatura del canciller de Canadá, Pierre Pettigrew.
Lagos, que se reunió el jueves con la jefa de la diplomacia del gobierno de George W. Bush, había informado casi simultáneamente que en una conversación con el primer ministro de Canadá, Paul Martin, éste le aseguró que Pettigrew no se postularía a la secretaría general de la organización hemisférica.
Las gestiones que realizó Rice tuvieron como preámbulo señales positivas para Insulza, sobre todo los anuncios de respaldo a su candidatura de los gobiernos de Haití y Paraguay, que en la primera ronda habrían apoyado a Derbez.
Una mayoría de 12 estados miembros de la Comunidad del Caribe (Caricom) también ratificó su apoyo al ministro chileno, y lo mismo hizo a su llegada a Santiago Antonio Parra, canciller del nuevo gobierno de Ecuador que encabeza Alfredo Palacio, instalado hace una semana tras la destitución del hasta entonces presidente Lucio Gutiérrez.
Para los observadores resultó sintomático que el anuncio de la renuncia de Derbez fuera realizado por Barco, de Colombia, país que Rice visitó antes de viajar a Chile y luego de iniciar su gira latinoamericana en Brasil, la primera nación que respaldó la candidatura de Insulza.
Se llegó a la determinación ofrecida por México de retirar la candidatura (a la secretaría general de la OEA) de ese país para lograr el consenso hemisférico, dijo la ministra colombiana.
Queremos reconocer aquí públicamente a nombre de todos los países la generosidad y la altura de propósitos del presidente (mexicano) Vicente Fox y su canciller para fortalecer esta organización, agregó.
Lagos expresó igualmente un profundo agradecimiento a Derbez, y dijo que lo sorprendió su retiro. Agregó, sin embargo, que fue muy importante la disposición que el jueves le manifestó Rice en el sentido de que Estados Unidos estaba interesado en llegar este lunes a la asamblea de la OEA con un candidato de consenso.
Insulza contó desde el comienzo con los respaldos de Brasil, Argentina y Uruguay, así como del gobierno venezolano encabezado por Hugo Chávez, lo cual le significó, según los observadores, una cerrada oposición inicial de Estados Unidos, que partió apoyando en esta carrera al ex presidente salvadoreño Francisco Flores.
El chileno alcanzó luego el respaldo de la mayoría de la Caricom, con lo cual aseguró 17 de los 18 votos que necesitaba. Pero en la víspera de la elección del 11 de abril Estados Unidos forzó la renuncia de Flores, volcando así su respaldo a Derbez.
La OEA se encuentra sin un secretario general titular desde octubre de 2004, cuando el ex presidente costarricense (1998-2002) Miguel Ángel Rodríguez debió renunciar al cargo tras ejercerlo por pocas semanas, a raíz de actos de corrupción durante su mandato que determinaron luego su encarcelamiento.
Cuando este lunes se reúna la asamblea de embajadores de la OEA, se espera que Insulza sea proclamado secretario general por aclamación, pero cabe la posibilidad de que Bolivia, y quizá Perú, expresen una disidencia en virtud de seculares conflictos con Chile.
Insulza, un abogado y cientista político que en los años 60 militó en las filas de la Juventud Demócrata Cristiana, se identificó en 1970 con la candidatura presidencial del socialista Salvador Allende desde el Movimiento de Acción Popular Unitaria.
Exiliado en México y Europa durante la dictadura del general Augusto Pinochet (1973-90), que derrocó a Allende, Insulza se adscribió a las llamadas corrientes renovadoras del socialismo chileno, y se convirtió con el paso de los años en el más cercano colaborador de Lagos.
En el gobierno de Eduardo Frei Ruiz-Tagle (1994-2000), fue ministro de Relaciones Exteriores, y en tal condición tuvo que manejar la crisis desatada por el arresto en Londres en octubre de 1998 de Pinochet. (