No viaje en este feriado, cambie cuatro días por cuatro años, dice la propaganda del candidato favorito a la alcaldía de la brasileña ciudad de Sao Paulo, José Serra, en los diarios, en las calcomanías de los automóviles, por toda la ciudad.
Su campaña trata de neutralizar una tendencia que podría costarle el triunfo en la segunda vuelta de las elecciones municipales, que tendrá lugar este domingo en 44 ciudades con más de 200.000 electores y en las que no hubo ganadores por mayoría absoluta el 3 de octubre.
El feriado del martes, Día de los Muertos, dio a luz un fin de semana de cuatro días en todo Brasil, porque gran parte de los trabajadores, del comercio y de los servicios públicos se saltan el lunes.
La población más rica es la que puede aprovechar mejor la coincidencia de varios días de asueto para viajar a la playa o al campo. Si lo hacen, dejarán de votar, en desmedro de Serra, candidato del Partido de la Socialdemocracia Brasileña (PSDB) y el más votado por las capas medias y ricas.
Por la misma razón, la campaña de Marta Suplicy, la actual alcaldesa que intenta la reelección, trata de estimular el turismo. La Compañía de Ingeniería del Tráfico (CET), órgano que controla el tránsito en Sao Paulo, distribuyó en los barrios ricos carteles en cantidades sin precedentes para orientar la salida de la ciudad, apuntando las horas y vías más aconsejables para hacerlo.
Para los funcionarios públicos municipales el asueto se prolonga por cinco días, ya que se trata de una fecha dedicada a estos trabajadores en Brasil. En realidad, la fecha se celebra el 28 de octubre, pero cada gobernante puede transferirla a otra jornada.
La alcaldía de Sao Paulo la fijó para este viernes 29, medida que los adversarios del gobernante Partido de los Trabajadores califican de electorera, pues vuelve más atractivo aun el turismo para una parte de la población.
La CET prevé que 1,28 millones de automóviles dejarán Sao Paulo este fin de semana prolongado, lo que puede representar una abstención fatal para el candidato Serra.
Las últimas encuestas apuntan a Serra una ventaja de entre siete y nueve puntos porcentuales sobre Suplicy, candidata del izquierdista PT, cuya mayor votación en la primera vuelta se concentró en los barrios pobres y periféricos, con habitantes que no viajan.
Como el municipio de Sao Paulo tiene 7,7 millones de electores, la diferencia entre los dos competidores estaría entre 540.000 y 700.000 votos, ventaja que puede desaparecer por la abstención de los que prefieren cuatro días de playa, aunque ello pueda representar cuatro años más del PT en la alcaldía.
Muchos de mis amigos (partidarios de Serra) dijeron que viajarán, pero por lo menos una me aseguró que se quedará para votar, comentó a IPS Walkiria Dutra de Oliveira, socióloga y directora del no gubernamental Instituto Fazer Brasil (Hacer Brasil).
La batalla electoral se hizo muy agresiva en Sao Paulo, con mucha bajeza, por ello mi tendencia es a votar nulo, comentó Dutra.
Las encuestas, que antes adjudicaban a Serra una ventaja de 12 a 13 puntos porcentuales, indican una recuperación de Suplicy en los últimos días, lo que alentó esperanzas en el PT.
Además de Sao Paulo, el PT del presidente Luiz Inácio Lula da Silva disputa alcaldías de otros 23 municipios, y es favorito en 14.
Pero el partido gobernante está en desventaja, según las encuestas, en dos ciudades de gran peso político, Sao Paulo, la mayor metrópoli y capital económica del país, y la meridional Porto Alegre, en su poder hace 16 años y cuna de sus experiencias exitosas, como el presupuesto participativo.
Perder estas dos alcaldías será un duro golpe simbólico para el PT y el gobierno de Lula, pero su repercusión dura 10, 15 días, pues las elecciones municipales no cambian de manera relevante el cuadro político nacional, sostuvo a IPS el politólogo Jairo Nicolau, autor de un estudio sobre los partidos políticos brasileños.
Están en juego, sin embargo, el gobierno de 15 capitales estaduales, cuyos alcaldes siempre tienen alguna influencia política. El PT ya conquistó seis de las 26 capitales en la primera vuelta y puede sumar tres o cuatro este domingo.
Aun perdiendo Sao Paulo y Porto Alegre, el partido afirmará su fuerza en las grandes ciudades, acumulando el mayor total de votos en estas elecciones municipales.
El PSDB, que disputa 20 alcaldías este domingo, se fortalecerá como el gran partido de la oposición, si confirma su triunfo en Sao Paulo.
