La llegada este martes a Venezuela del brasileño Valter Pecly Moreira, al frente de una misión de la OEA, marca el inicio de una estrecha observación internacional sobre el referendo del 15 de agosto, que decidirá si Hugo Chávez se mantiene o no en la presidencia hasta 2007.
El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas, Kofi Annan, despachó con ese fin a su asesor para asuntos latinoamericanos, el ecuatoriano Diego Cordovez.
Y el Mercado Común del Sur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay) enviará al ex mandatario argentino y presidente de su Comisión de Representantes Permanentes, Eduardo Duhalde.
El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, reunido con su par chileno Ricardo Lagos, reclamó el lunes un proceso honesto y abierto, en el que el pueblo venezolano tenga oportunidad de expresar su opinión sin temor a represalias.
Caracas replicó que Washington difícilmente pueda darle lecciones de transparencia electoral. Venezuela, en todo caso, da ejemplo, pues en este país ganan quienes más votos obtengan, afirma el texto distribuido por la cancillería este martes.
Brasil, Chile, España, Estados Unidos, México y Portugal conformaron un año y medio atrás el grupo de países amigos del secretario general de la OEA (Organización de Estados Americanos) para mediar en la crisis política venezolana, a instancias del presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva.
El grupo fue superado en la práctica por observadores de la OEA y del estadounidense Centro Carter para la Paz en un largo proceso, desde diciembre de 2003 hasta junio de 2004, de recolección y verificación de 2,5 millones de firmas presentadas por la oposición para solicitar el referendo sobre el mandato de Chávez.
El nombramiento de Moreira, embajador de Brasil ante la OEA, como jefe de la nueva misión del organismo, es muestra del cambio de política de Brasilia, ahora más activa y menos reactiva respecto del proceso que vivimos. Es un respaldo a la búsqueda de democracia, dijo a IPS el portavoz opositor Timoteo Zambrano.
Moreira, quien representa a Brasil en la OEA desde 2000, cuando gobernaba el ex presidente Fernando Henrique Cardoso (1995-2003) es un diplomático de carrera, con mucha experiencia y profesionalismo, y será garantía para todas las partes, opinó Zambrano.
El diputado oficialista Tarek Saab, presidente de la comisión de asuntos exteriores de la Asamblea Nacional legislativa, comentó a IPS que la designación de Moreira es una decisión inteligente del secretario general (César) Gaviria, porque el anterior jefe de misión tenía una actitud parcializada.
El oficialismo criticó al ex director de la misión de la OEA, y jefe del gabinete de Gaviria, el colombiano Fernando Jaramillo, al que veía inclinado por la oposición durante el proceso de recolección y verificación de firmas.
La OEA y el Centro Carter trabajaron como un binomio compacto y supervisaron todas las fases del proceso, al punto de recibir una copia de cada acta que se levantaba en los centros de recolección de firmas.
Fue mucho más que una simple observación, casi reemplazaron al árbitro, que es el Consejo Nacional Electoral, uno de los cinco poderes independientes del Estado venezolano, dijo a IPS un alto responsable oficialista del organismo comicial.
Chávez reconoció el resultado de la recolección de firmas y anunció su sometimiento al resultado del referendo una noche después de sostener una larga reunión con el ex presidente estadounidense Jimmy Carter (1977-1981), cabeza del centro que lleva su nombre.
Para el decisivo referendo, el poder electoral ha buscado diluir el monopolio de la llave OEA-Carter, con un reglamento para observadores que limita un poco su actividad, e invitando a muchas más personas e instituciones a la observación.
Se sabe que fueron invitadas las organizaciones regionales Unión Interamericana de Organismos Electorales y el Centro de Asesoría y Promoción Electoral, y figuras como los premios Nobel de la Paz Mijaíl Gorbachov, Rigoberta Menchú, Adolfo Pérez Esquivel, el de Literatura Gabriel García Márquez, y el de Economía Joseph Stiglitz.
La Unión Europea (UE), que financió con 600.000 dólares la observación de la OEA y del Centro Carter a la recolección de firmas, expresó interés en participar, pero todavía no ha sido invitada, dijeron fuentes de su delegación en Caracas.
En la cumbre de gobernantes del Mercado Común del Sur (Mercosur), celebrada este mes en Argentina, Lagos insistió en la conveniencia de que observadores de ese bloque, del grupo de países amigos y de la UE acudiesen a Venezuela para avalar la pulcritud de la consulta popular.
A Duhalde se sumará, a pedido del presidente argentino Néstor Kirchner, el ex mandatario de ese país Raúl Alfonsín (1983-1989).
Tal búsqueda de referencias externas se debe en buena medida a la desconfianza entre los contendores por el poder en Venezuela, al cabo de casi tres años de aguda confrontación, marcada por un efímero golpe de Estado, una huelga general de dos meses y episodios de desórdenes, violencia y desobediencia militar.
Chávez y sus seguidores han dicho siempre que respetarán el resultado del referendo. La oposición, en cambio, muestra cada día su desconfianza ante poderes públicos en los que el oficialismo ha logrado mayoría, como el Consejo Electoral, el Tribunal Supremo de Justicia, el Poder Ciudadano y el Legislativo.