Los camioneros autónomos, que aseguran un 70 por ciento del transporte de carga de Brasil, iniciaron este domingo a medianoche una huelga de 72 horas para reclamar la liberación de fondos federales que debían destinarse a la reparación de la destruida red vial del país. "Algunos conductores ya empezaron el movimiento por la tarde", dijo el presidente de la Asociación Brasileña de Camioneros (ABICAM), José de Fonseca Lopes, principal nucleamiento del sector, que espera una adhesión masiva de los 450.000 autónomos al frente de una flota de 2,6 millones de vehículos. En el centro de las demandas se encuentran la Contribución de Intervención en el Dominio Financiero (CIDE) o "impuesto a los combustibles" que el gobierno recauda desde 2001 para mantener carreteras, ferrocarriles y puertos del país.
