Los presidentes del núcleo duro del Mercosur, los cuatro socios plenos Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay lograron el miércoles disimular la crisis del bloque, frente a los invitados extranjeros. Y eso a pesar que el presidente anfitrión Néstor Kirchner dijo al llegar a la nororiental ciudad de Puerto Iguazú, donde se realiza este jueves la cumbre del bloque, que su gobierno no descarta imponer nuevas medidas restrictivas a las importaciones de Brasil. Del lado brasileño encontró disposición a negociar salidas. "No vamos a instalar una guerra comercial", indicó Luiz Felipe Macedo Soares, el nuevo coordinador del Mercosur. Kirchner dijo: "No descarto la posibilidad de que sean ampliadas (las restricciones a las importaciones brasileñas) a la órbita textil. Lo estamos evaluando". Y agregó: "Se debe buscar un punto de equilibrio que permita desarrollar a todos los países del Mercosur en forma equilibrada". Fue después de que la Argentina anunciara las restricciones a las importaciones de electrodomésticos brasileños.