El gobierno de Chile confía en que el acuerdo que negocia con India y que contempla la liberalización de sólo una parte del intercambio comercial estará terminado durante el primer trimestre del próximo año. Ello, pese a que ya ha recibido algunas aprensiones de ese país respecto de productos sensibles como la leche, azúcar y algunos del sector industrial. Esa es la esperanza que alberga el jefe de la Dirección de Relaciones Económicas Internacionales de la cancillería, Osvaldo Rosales, quien anticipó que tanto el gobierno como el sector privado trabajan arduamente para elaborar una lista de productos locales afectos a altos aranceles, la que se enviará a las autoridades indias antes de la primera reunión formal que ambos países sostendrán a fines de agosto en Santiago.