El secretario adjunto para Asuntos de América Latina del Departamento de Estado de Estados Unidos, Roger Noriega, dijo no querer "un enfrentamiento diplomático por micrófono", en relación con las expresiones del canciller argentino Rafael Bielsa, quien expresó estar "harto" de sus declaraciones sobre su país. Noriega afirmó que Washington "apoya los esfuerzos del presidente" Néstor Kirchner para superar la "crisis institucional", al tiempo que reconoció que "hay otras cosas que tiene que hacer" y que "se ha comprometido" a llevar adelante. Empero, no reconoció haber sido el autor de las declaraciones que despertaron la ira de Buenos Aires, pero las atribuyó a "un alto funcionario" cuyos "comentarios muestran una preocupación para la gente de la Argentina". Bielsa, quien acompaña a Kirchner en su visita oficial a China, dijo que "el gobierno está harto de las intromisiones, en enfática respuesta a una alta fuente de la cancillería estadounidense que había dicho estar preocupada por la "escalada piquetera" en relación a la intensificación de la movilización del movimiento de trabajadores desocupados.
