Por primera vez en más de un año, el gobierno español volvió a hablar de "relación estratégica" para definir a la que mantiene con la Argentina, a la vez que ponderó como "magnífico" al candidato a embajador de Buenos Aires en Madrid Carlos Bettini, cuyo papel en la privatización de empresas genera públicas objeciones en su país. El relanzamiento de la relación bilateral fue el resultado de la primera reunión mantenida en España por el canciller de esa nación, Miguel Moratinos, y su par de Argentina, Rafael Bielsa. En ella se decidió crear un "grupo de trabajo" para abordar la situación de 80.000 inmigrantes argentinos indocumentados.