Sonia Gandhi dio otro paso hacia la jefatura del gobierno de India este sábado, cuando el Partido del Congreso, victorioso en las elecciones concluidas esta semana, la proclamó como su abanderada.
El partido de Gandhi cuenta con 137 de los 543 escaños del Lok Sabha (cámara baja parlamentaria), y junto con los grupos regionales que lo apoyan controla 217. Así, depende de los 64 escaños de los partidos comunistas del Frente de Izquierda sólo para lograr una mayoría simple.
La rivalidad entre el Partido del Congreso y los partidos comunistas se remonta a la independencia de India, en 1947. Aun hoy, son enconados adversarios en estados como Kerala, en el sur, y Bengala Occidental, donde el Frente de Izquierda está en el poder.
Pero estos grupos se unieron para las elecciones con el propósito expreso de derrotar a Bharatiya Janata, al que acusan de alterar desde el gobierno las bases secularistas y democráticas de la república india.
El Frente de Izquierda logró la mayor votación de su historia y se ubicó en tercer lugar, detrás del Partido del Congreso y de Bharatiya Janata.
Durante la campaña electoral, la postulación de Gandhi, de 57 años, fue cuestionada porque la dirigente nació en Italia. Pero su origen nunca fue motivo de queja para el Frente de Izquierda, aliado clave del Partido del Congreso en esta instancia.
Sin embargo, la oposición a su figura persiste, no sólo del derrotado derechista, ultranacionalista e hinduista partido Bharatiya Janata, sino también de correligionarios de la propia Gandhi, viuda del asesinado primer ministro Rajiv Gandhi.
Fuera de la sede del parlamento de India donde los legisladores electos del Partido del Congreso designaron a Gandhi, los dirigentes de Bharatiya Janata se manifestaban para proponer una ley que impida a aquellos que no son nacidos en el país encabezar su gobierno.
El Partido del Congreso no pudo encontrar un líder de origen indio en una población de 1.000 millones de personas, dijo el portavoz de Bharatiya Janata, Mukhtar Abbas Naqvi.
El dirigente sostuvo que su partido vigilaría al detalle la marcha del próximo gobierno. Esperen seis meses, dijo a la prensa.
Pero Gandhi permaneció tan impertérrita como se mostró durante la campaña electoral, en la que tuvo que soportar insistentes ataques personales de Bharatiya Janata.
Al aceptar la designación, se refirió al veredicto de las elecciones —celebradas en cuatro fases entre abril y mayo— y sostuvo que el pueblo había rechazado el fundamentalismo de organizaciones hindúes aliadas de Bharatiya Janata.
Alcanzada la meta común de derrotar al hinduismo, los integrantes de la nueva coalición gobernante aclararon que tienen grandes diferencias en materia económica que deberán resolverse a través de un programa común mínimo.
Pero varios grupos del Frente de Izquierda aún deliberan si se integrarán al gabinete del Partido del Congreso o deberán limitar su apoyo a garantizar la permanencia del nuevo gobierno en el poder para mantener a raya a Bharatiya Janata.
El Partido del Congreso gobernó India durante 49 de los 57 años de vida independiente. Bharatiya Janata era en los años 80 un pequeño partido con sólo dos representantes en el parlamento,
Las reformas económicas comenzaron en un gobierno del Partido del Congreso, en 1996, pero el malestar social que originaron abrió paso a un breve gobierno izquierdista ese mismo año. Luego, Bharatiya Janata se encaramó en el poder.
Sonia Gandhi es viuda del primer ministro Rajiv Gandhi, asesinado en 1991 por miembros de los Tigres para la Liberación de la Patria Tamil.
Rajiv, por su parte, era hijo de la también asesinada Indira Gandhi, primera ministra entre 1966 y 1977 y entre 1980 y 1984, cuando fue asesinada por uno de sus guardaespaldas, de la etnia sij.
El padre de Indira Gandhi, Jawaharlal Nehru, fue el principal colaborador de Mohandas (Mahatma) Gandhi, el líder de la independencia india del dominio británico. Nehru gobernó India entre 1947 y 1964.
La dinastía Nehru-Gandhi gobernó el país durante la mayor parte de su historia independiente.
