Contra la voluntad de varios de los países miembro, la Unión Europea (UE) puso fin el miércoles en Bruselas a la moratoria de casi seis años sobre la importación de organismos genéticamente modificados de Argentina, al autorizar el ingreso de cajas de maíz dulce BT11. La soja argentina transgénica será una de las primeras beneficiadas. La decisión adoptada por la UE se produjo antes que venciera el plazo para la revisión de la moratoria, en junio. El gesto trata de apaciguar el contencioso con Estados Unidos, Canadá y Argentina los tres grandes productores mundiales de este tipo de cultivos que habían denunciado el caso ante la Organización Mundial del Comercio e iniciado un proceso. Washington acusa a Europa de proteccionismo y denunciaban pérdidas por 4 billones de dólares.