Cerca de 4.000 de unas 9.000 hectáreas de tierra en el sudeste de Paraguay, propiedad de una empresa brasileña, fue invadida por decenas de campesinos sin tierra en la madrugada del miércoles, pese a la resistencia policial, que incluso intentó impedir el avance de los labriegos con disparos de fusiles. La propiedad está ubicada a unos 160 kilómetros al oeste de fronteriza Ciudad del Este.