El canciller brasileño, Celso Amorim, defendió el "derecho" de su país a restringir e ingreso de algunos tipos de inspecciones nucleares, la cuales dijo deben ser siempre negociadas. Empero, Amorim precisó que Brasil nunca puso obstáculos a las inspecciones, tras defender el desarrollo en materia de energía atómica desarrollada en esta nación. De ese modo, el ministro salió al cruce de un artículo publicado por el diario estadounidense The Washington Post en el cual se indicó que Brasil impedía la inspección de la Agencia Internacional de Energía Atómica a su planta nuclear de Resende, en las cercanías de Río de Janeiro.
