Una multitud se congregó el jueves frente al Palacio de Tribunales de Argentina para reclamar nuevamente por mayor seguridad, en un acto en el que Juan Carlos Blumberg, padre de un joven secuestrado y luego asesinado en marzo, exigió que se declare una "emergencia judicial" y que haya "control civil para los jueces y fiscales" entre otras medidas. La marcha marcó la continuidad del reclamo expresado el 1 de este mes, cuando unas 150.000 personas se concentraron frente a la sede del Congreso. Desde ese día hasta ahora el tema de la inseguridad se instaló como una prioridad en la agenda política del país. Blumberg fue al Congreso con un petitorio para reclamar penas más duras. Algunos puntos avanzaron más rápido que otros y el hombre no dudó en criticar a los diputados por la demora. Como respuesta, el gobierno adelanto un plan nacional de seguridad, que involucra cambios profundos en las fuerzas policiales y en la legislación penal.