El alcalde de la capital mexicana, el izquierdista Andrés López Obrador, acusó este lunes al gobierno de montar un plan en su contra con apoyo de la DEA estadounidense para liquidar sus aspiraciones como candidato presidencial.
La excelente imagen de López Obrador, del opositor Partido de la Revolución Democrática (PRD), se desmoronó en los últimos días ante denuncias de corrupción contra un par de sus colaboradores.
López llamó a sus simpatizantes a reunirse el domingo en el zócalo, la plaza centra de la capital, donde dará explicaciones sobre la estrategia diseñada por el conservador gobierno de Vicente Fox para desprestigiarlo políticamente.
El alcalde dijo que nada sabe de los malos manejos de dinero y de los actos de corrupción en que habrían incurrido René Bejarano, su ex jefe de campaña electoral y ex secretario particular, y el ex jefe de finanzas de la capital, Gustavo Ponce, denunciados en las últimas dos semanas mediante vídeos filmados con cámara oculta.
Vamos a reunirnos en el zócalo por lo menos 60.000 personas. Ya van a ver la fuerza que tiene el Peje, alias con que se conoce a López Obrador, dijo a IPS Beatriz Baños, dirigente de la Asamblea de Barrios, un grupo ligado al PRD que trabaja por conseguir vivienda para sectores pobres de la capital.
Todo es una campaña de los poderosos contra el Peje, aseguró Baños.
Firmas encuestadoras, que ubicaban dos semanas atrás a López Obrador como el político de mayor prestigio y con más alta aprobación ciudadana en el país, difundieron los últimos días nuevos sondeos en los que, sin excepción, se reporta una caída marcada en su imagen.
En una de ellas, el diario Reforma preguntó el 4 de este mes a 500 personas en los 32 estados del país, su opinión sobre el alcalde en cuanto a honestidad.
Casi 45 por ciento de los entrevistados lo calificó de corrupto, porcentaje que contrastó con una encuesta anterior a los escándalos, cuando menos de 22 por ciento de los consultados expresaba esa opinión.
A pesar de que los ataques, el alcalde, uno de cuyos eslóganes es la honestidad valiente, declaró que no lo van a doblar, pues sus ideales y principios están firmes.
Uno de los vídeos fue conseguido con colaboración de la DEA (agencia antidrogas de Estados Unidos), por lo que esa agencia estaría involucrada en la campaña en su contra, afirmó el alcalde, aunque no exhibió pruebas.
Desde que asumió el cargo en 2001, la popularidad de López Obrador creció sin pausa, al punto de que para muchos su candidatura presidencial por el PRD para 2006, cuando Fox concluye su mandato de seis años, arrasaría a sus adversarios.
El alcalde despierta interés de observadores locales y extranjeros por la forma de encarar su gobierno y por su imagen, diferente a la de otros políticos y funcionarios mexicanos.
López Obrador trabaja toda la semana desde las seis de la mañana, vive en un departamento de clase media baja, maneja un desvencijado automóvil y no lleva un equipo de seguridad importante.
A mediados de este mes comenzaron a verse en las calles de la capital carteles con su rostro y una leyenda en grandes letras: Se busca. En un cuerpo más pequeño podía leerse: futuro presidente, por su honestidad, por su amor a la patria, por saber gobernar y porque los necesitamos.
No hay que adelantarse a los tiempos, pues de aquí a 2006 puede pasar cualquier cosa en el país, advirtieron en varias ocasiones los politólogos ante el caldeado ambiente que desde fines del año pasado se vive en cada partido político con miras a las elecciones presidenciales.
En el caso del alcalde, la advertencia se cumplió, pues fue golpeado con fuerza por el vendaval político de los vídeos. Además, según reconocen los dirigentes del PRD, ese partido fundado en 1989, vive hoy la peor crisis de su historia por esas filmaciones.
En uno de las cintas, Bejarano, quien se preciaba de ser amigo de López Obrador, influyente político y (hasta dos semanas atrás) jefe de bancada del PRD en la Asamblea Legislativa de la capital, fue exhibido recibiendo miles de dólares del empresario Carlos Ahumada, dueño de una empresa constructora, dos equipos de fútbol y del diario El Independiente.
Ahumada, argentino naturalizado mexicano, denunció haber sido chantajeado por las autoridades capitalinas.
Pero sus empresas han ganado periódicamente licitaciones abiertas para realizar obras de infraestructura en la capital, gobernada por el PRD desde 1997, cuando se realizaron las primeras elecciones para el cargo de alcalde.
Antes de ese año, la ciudad era administrada por un regente nombrado por el presidente en turno.
El vídeo de Bejarano, que ha colaborado con el gobierno capitalino en diversos cargos, siguió a otro en el que se observa al ex jefe de finanzas del municipio de la capital apostando en un casino de Las Vegas grandes cantidades de dinero.
Ese ex funcionario, Gustavo Ponce, que se esfumó de la luz pública tres ser cesado de su cargo por López Obrador, era amigo de Ahumada y desde mediados del año pasado sólo trabajaba de miércoles a jueves en la alcaldía, mientras el resto del tiempo permanecía en Las Vegas apostando.
Desde la clandestinidad, Ponce afirmó que el alcalde lo había instruido directamente para realizar movimientos ilegales en cuentas de la alcaldía para poder concretar varias obras públicas.
Todas las acusaciones son parte de una campaña para desprestigiarme dirigida por el gobierno y la derecha insistió López.
Su defensa se centrará en señalar que todos los golpes en su contra fueron diseñados por el gobierno, el conservador Partido Acción Nacional, al que pertenece Fox, y el ex presidente Carlos Salinas de Gortari (1988-1994), del Partido Revolucionario Institucional, que gobernó México de 1929 a 2000.
Por dignidad y honor, López Obrador está dispuesto a apostarlo todo y así demostrar que no cometió ninguna irregularidad.
Mientras, el procurador (fiscal) de la capital, Bernardo Batiz, informó que la policía busca está tras Ahumada y el ex jefe de finanzas de la ciudad, mientras el ex secretario de López Obrador ya fue citado a declarar.
Para el politólogo Jesús Silva-Herzog, la crisis de la alcaldía de la capital ha servido para reiterar la incapacidad de López para reconocer sus errores, para admitir que abrió la puerta a la corrupción y que llevó al palacio de gobierno (alcaldía) a un grupo de estafadores.
Como siempre, (al alcalde) lo persiguen lobos del mal, él no es responsable de nada, se cree un santo (…) y quienes lo critican son solamente las fuerzas oscuras del bosque, añadió en entrevista con IPS.
Desde que asumió el cargo y comenzó a subir en las encuestas, López Obrador declaraba periódicamente que era políticamente indestructible por su honestidad personal y la de su gestión. (FIN/IPS/dc/dcl/ip/04).