El socialista José Luis Rodríguez Zapatero aplicará desde el gobierno de España una política antiterrorista más allá de las fronteras nacionales, dijo a IPS su probable futuro canciller, Miguel Angel Moratinos.
Las líneas generales de esa estrategia serán una mayor cooperación entre los servicios de inteligencia militares y policiales de Europa, la reducción de los focos de fanatismo y violencia mediante la asistencia al desarrollo, y la oposición a las guerras preventivas impulsadas por Washington.
Al terrorismo no se le gana, no se lo derrota con guerras, repite Rodríguez Zapatero, quien asumirá el cargo de jefe de gobierno en la segunda mitad de abril.
Los atentados del 11 de marzo en Madrid, que provocaron 189 muertos y más de 1.500 heridos, fueron perpetrados tres días antes de las elecciones generales, ganadas por el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) de Rodríguez Zapatero.
La masacre debilitó al gobernante Partido Popular, al que gran parte de la población culpó por su alineamiento con Washington y Londres en la invasión a Iraq, y por la manipulación de la información acerca de las pistas sobre sus autores materiales.
Según fuentes policiales consultadas por IPS, por ese atentado están bajo investigación el Grupo Islámico de Combatientes Marroquíes y la red terrorista islámica Al Qaeda (La Base), que reivindicó el atentado en un comunicado.
La estrategia antiterrorista del futuro gobierno afrontará problemas desde dos frentes.
El gobierno estadounidense de George W. Bush insiste en reclamar a España que mantenga las tropas ocupantes en Iraq, comandadas por Washington sin supervisión de la ONU.
Sin embargo, el secretario de Estado (canciller) estadounidense Colin Powell transmitió este miércoles a Rodríguez Zapatero su disposición a negociar una nueva resolución de la ONU (Organización de las Naciones Unidas) respecto del status de Iraq.
Por otro lado, existen obstáculos en la Unión Europea para coordinar una lucha antiterrorista conjunta, a pesar de lo avanzado en los últimos años y de los compromisos políticos que van asumiendo sus respectivos gobiernos, dijo a IPS Fernando de Salas, rector de la centenaria Sociedad de Estudios Internacionales (SEI).
Rodríguez Zapatero se entrevistó con el primer ministro británico Tony Blair, a quien comunicó su deseo de cambiar los parámetros de la ocupación de Iraq, dándole un papel central a la ONU.
La nueva estrategia antiterrorista de España estará ligada a un cambio en las relaciones internacionales, dijo Moratinos.
Se basará en el acercamiento a Francia y Alemania, y en una relación más equilibrada con Estados Unidos, rompiendo con el alineamiento incondicional asumido por el derechista mandatario saliente José María Aznar.
Un primer paso será cumplir el compromiso del PSOE de retirar las tropas españolas de Iraq el 30 de junio, si antes de esa fecha no quedan bajo autoridad de la ONU la pacificación de ese país y su reconstrucción política y social.
Fuentes próximas al líder socialista dijeron a IPS que, en caso de que se decida retirar las tropas españolas, todas o parte de ellas serían trasladadas a Afganistán bajo órdenes de la ONU, para colaborar en la lucha contra el terrorismo y la pacificación de ese país.
Esa sería una prueba contundente de que la retirada no significaría renunciar a la lucha contra el terrorismo, subrayaron varias fuentes.
El viernes 19, el canciller Powell y el candidato presidencial estadounidense del opositor Partido Demócrata, John Kerry, coincidieron en señalar que éste no es momento para irse de Iraq.
Tras la invasión, encabezada por Estados Unidos y Gran Bretaña en marzo del año pasado, Iraq vive una situación de grave inseguridad, con una creciente resistencia armada a la ocupación, que se expresa en ataques a las fuerzas extranjeras y a blancos iraquíes.
Powell se reunió este miércoles en Madrid con Rodríguez Zapatero y Moratinos, pero no obtuvo un cambio de posición.
Moratinos aseguró a IPS que el futuro presidente cumplirá la promesa del retiro de Iraq.
No vamos a defraudar a la gente, enfatizó. Según el diplomático, ex enviado especial de la UE a Medio Oriente, mientras haya una ocupación militar en ese país árabe, seguirá existiendo una situación de inestabilidad, violencia y deterioro continuo
Por ello, los socialistas reclaman que se otorgue a la ONU un papel político central, para garantizar el respeto de los derechos humanos y del derecho internacional, y encauzar el proceso político en Iraq.
Además de atacar las causas sociales del terrorismo, es fundamental establecer una acertada coordinación de policías y servicios de inteligencia de los países.
Pero ese camino ya se perfila difícil para el líder socialista. Gran Bretaña se pronunció contra la propuesta trabajada el lunes por los cancilleres de la UE, para ser debatida y aprobada este jueves, que establecería el compromiso de los servicios de inteligencia de los países del bloque a compartir información.
Jack Straw, canciller británico, dijo el martes en Londres que compartimos la inteligencia a escala bilateral, pues estos intercambios requieren un grado de confianza muy alto.
El comisario de Política Regional de la UE, el francés Michel Barnier, reconoció el martes en Bruselas que no existe todavía el impulso suficiente para crear una agencia europea de información, aunque Francia sea partidaria de compartir la información.
Al margen del acuerdo posible en la UE, en medios diplomáticos se recuerda que hay convenios vigentes de lucha contra el terrorismo que aún no han sido asumidos por los 15 países del bloque.
Uno de esos países es Alemania, que no ratificó el tratado de establecimiento de la Euro-Orden, y que solicitó el lunes sin éxito una prórroga a la fecha límite para hacerlo, en junio.
La Euro-Orden establece la obligación de los países parte a evitar el largo proceso que requieren los pedidos de extradición, y cumplir de inmediato esos requerimientos judiciales, así como los referidos a arresto de supuestos terroristas e incautación de sus bienes.
Existen otras normas en la materia que rigen en el bloque europeo, pero no son cumplidas por muchos estados, admitió el comisario de Justicia e Interior, el portugués Antonio Vitorino, quien eludió enumerar a esos países cuando fue interrogado en rueda de prensa.
El presidente de Francia, Jacques Chirac, se pronunció el martes, en París, dispuesto a compartir esfuerzos en materia de antiterrorismo, y coincidió con los socialistas españoles en que es preciso tratar desde la raíz las situaciones que favorecen el terrorismo, como la ignorancia, la injusticia y la miseria.
Para el analista internacional De Salas, además de reforzar la cooperación europea, es preciso marchar junto a Estados Unidos, en líneas paralelas, ni independientes ni adversas. Estamos condenados a entendernos y codirigir.
De Salas, militar retirado y abogado, subrayó que los países europeos están en la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) junto a Estados Unidos, y que ese es un acuerdo válido, vigente.
También sobrevuela el fantasma de las represalias estadounidenses.
Una fuente militar que pidió no ser identificada indicó que si Madrid se distancia de la política exterior estadounidense, Washington podría adoptar represalias contra España, como vetar la exportación a este país de componentes electrónicos y varios productos utilizados por astilleros, aeronáutica y otros sectores.
Semejante medida podría causar grandes pérdidas a España, concluyó la fuente.
