El presidente de Argentina, Néstor Kirchner, pidió perdón el miércoles de parte del Estado nacional "por la vergüenza de haber callado durante 20 años de democracia por tantas atrocidades", en referencia a las violaciones de derechos humanos cometidas por la última dictadura militar (1976-1983). Lo hizo luego de concretar con el jefe de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires, Aníbal Ibarra, el convenio que convertirá lo que fue el mayor centro clandestino de detención de la Marina en "un espacio para la memoria y promoción de los derechos humanos". Después de la firma de ese documento, las rejas de la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA) se abrieron y el público, que esperaba afuera, fue accediendo al predio