El gobierno argentino y el Fondo Monetario Internacional (FMI) retomaron las negociaciones y lograron superar las diferencias en dos de los cuatro puntos que estaban en conflicto, pero se mantienen otros dos, según informó el jefe de Gabinete, Alberto Fernández. Según el funcionario, una carta del FMI llegada ayer, en contestación a la contrapropuesta que el ministro de Economía Roberto Lavagna había enviado el viernes a Washington, contiene sólo dos exigencias sobre las cuatro originales: que la oferta a los acreedores de bonos en default tenga una aceptabilidad de 80 por ciento (para Argentina alcanza con 66 por ciento) y que los bancos que intervendrán en el canje de la deuda no puedan retirarse hasta el final de la operación La respuesta fue enviada anoche, después de ser redactada por Kirchner, Fernández y Lavagna en una reunión de más de dos horas en la quinta de Olivos. El gobierno espera este martes una respuesta del Fondo que será decisiva, ya que esta tarde vence el pago de los 3.150 millones de dólares que debe Argentina al organismo internacional de crédito.