El jefe de gabinete del gobierno argentino, Alberto Fernández, aseguró este viernes que el alejamiento de Horst Koehler de la conducción del Fondo Monetario Internacional (FMI) no repercutirá en forma especial en la relación con el organismo, debido a que las negociaciones que encara Argentina son con la "institución" y no con personas en particular. Koehler renunció para lanzarse como candidato a gobernar su país, Alemania. Fernández reconoció que "Koehler era un hombre que había logrado entender, de manera singular, el tema de la deuda en América Latina" y que eso lo diferenciaba de otros funcionarios del organismo, con una "mirada" diferente respecto al caso argentino.