Los 15 países de la Comunidad del Caribe (Caricom) clamaron ante la ONU por un inmediato despliegue de una fuerza multinacional de paz en Haití, cuya capital está rodeada por rebeldes armados. Pero el foro ha dicho que se tomará su tiempo para decidir.
El Consejo de Seguridad de la ONU (Organización de las Naciones Unidas) único cuerpo con jurisdicción para crear una fuerza de mantenimiento de paz, rechazó este jueves las presiones para tomar una decisión.
En un comunicado divulgado a nombre de los 15 países que integran el Consejo, el embajador de China, Wang Guangya, sostuvo que considerarán opciones urgentes para un acuerdo internacional, inclusive la creación de una fuerza que respalde un acuerdo político, según la carta de la ONU.
El Consejo continuará discutiendo con la Caricom y la Organización de Estados Americanos (OEA) el mejor camino para afrontar la crisis del país caribeño, donde grupos rebeldes, liderados por ex paramilitares y convictos de graves violaciones de derechos humanos, controlan buena parte del territorio y amenazan con tomar la capital, Puerto Príncipe.
La actual situación haitiana ya no puede verse sólo como un asunto interno, dijo el canciller de Jamaica, K.D. Knight, ante el Consejo de Seguridad.
Hay un serio riesgo para la paz y la seguridad de la región, dado el flujo de refugiados que amenaza desbordar los recursos de los estados del Caribe, advirtió.
Si bien la Caricom continuará jugando su papel en buscar un entendimiento para superar la crisis, creemos que la ONU tiene especial responsabilidad en asistir a Haití, por su participación en anteriores misiones de mantenimiento de paz, añadió.
Francia, antiguo poder colonial en Haití, ya había propuesto la creación de una fuerza multinacional.
El canciller francés Dominique de Villepin dijo este jueves en París que su país querría ver el despliegue de una fuerza en cuestión de días.
El régimen (encabezado por Jean-Bertrand Aristide) ha llegado a un callejón sin salida y ha puesto en juego la legalidad constitucional, sostuvo De Villepin.
Francia respalda asimismo el establecimiento de un gobierno de unidad nacional no partidario, propuesta similar a la de la Caricom.
Aristide afronta la exigencia de renuncia desde distintos sectores: la oposición política, antiguos seguidores desilusionados con su gestión, y ex miembros del ejército disuelto y de grupos paramilitares que estaban en el exilio.
La crisis haitiana está fuera de control, dijo al Consejo el ministro de Relaciones Exteriores de Bahamas, Frederick Mitchell.
Sean cuales sean los motivos, si la comunidad internacional se niega a actuar y a hacerlo rápidamente, estaremos condonando el intento de derrocar a un gobierno por la fuerza, advirtió.
Mitchell recordó que existen 32 ejemplos previos de golpes o derrocamientos de gobernantes en la nación caribeña, la más pobre de América.
La pregunta que debe hacerse la comunidad internacional es si está dispuesta a contribuir a que la historia se repita o a ayudar a romper ese ciclo, agregó.
A su juicio, el problema inmediato es ayudar a restaurar la ley y el orden, no la próxima semana o el mes que viene, sino hoy.
Mitchell y Knight fueron los únicos ministros que hablaron este jueves ante la sesión del Consejo, subrayando la urgencia de la situación haitiana.
El embajador francés Jean-Marc de La Sabliere dijo a la prensa que el Consejo, al igual que la Caricom, está comprometido a hallar una salida política a la crisis.
Compartimos la preocupación de la Caricom y su sentido de urgencia. Pero continuaremos nuestras consultas en los próximos días, señaló.
Una propuesta de crear un gobierno interino de unidad, parcialmente aceptada por Aristide, fue rechazada por los líderes rebeldes.
Mientras, el presidente sostuvo que si los insurgentes no son detenidos habrá un baño de sangre en Puerto Príncipe y una ola de refugiados huyendo hacia Estados Unidos.
El presidente estadounidense George W. Bush ordenó a la guardia costera que impida llegar a la costa a cualquier embarcación de haitianos.
Tendremos una presencia robusta con una estrategia efectiva (en Haití), así que alentamos firmemente al pueblo haitiano a permanecer en su país y lograr una solución política a este problema, dijo Bush el miércoles.
Sin embargo, Estados Unidos sólo envió a la isla un contingente de elite para proteger su embajada. (