Irlanda obtuvo por tercer año consecutivo el galardón a la nación más «globalizada», seguida de Singapur, Suiza y Holanda, según la cuarta edición del Indice de Globalización publicado por la revista estadounidense Foreign Policy.
Singapur encabeza la lista de países en desarrollo, según el estudio, que mide el grado de integración al comercio, las finanzas, la política y la tecnología mundiales de 62 países que representan 84 por ciento de la población y 96 por ciento del producto mundiales.
Los países en desarrollo que siguen a Singapur en el índice son Malasia, en el puesto número 20, Panamá (27), Botswana (30), Corea del Sur (32), Filipinas (33), Argentina (34) y Túnez (35).
El informe fue publicado este martes, el mismo día en que la Organización Internacional del Trabajo (OIT) daba a conocer en Londres el informe final de la Comisión Mundial sobre la Condición Social de la Globalización.
El estudio ordenado por la OIT a una treintena de políticos, empresarios, sindicalistas y expertos propone que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) asuma entre sus funciones la de alentar un sentido de justicia en el proceso de globalización.
Como en las ediciones anteriores, el informe de Foreign Policy identifica a Irán como el país menos globalizado entre los 62 analizados. En los últimos puestos, delante de Irán, están India, Egipto, Indonesia, Venezuela, China y Bangladesh.
El informe se basa sobre datos compilados en 2002, año en que, según sus autores, la integración mundial se redujo debido al arrastre de la caída económica de 2001, agravada por los atentados del 11 de sepitembre contra Nueva York y Washington.
El Indice sobre Globalización es un proyecto conjunto de Foreign Policy, publicación de la Fundación Carnegie para la Paz Internacional, y la consultora de empresas A. T. Kearney.
"La globalización no es una moda. Llegó para quedarse", comentó Moises Naim, editor de Foreign Policy.
El Indice se determina por la combinación de una docena de variables objetivas y medibles, con categorías económicas, personales, tecnológicas y políticas.
Entre las variables económicas figuran el porcentaje de comercio dentro del producto interno bruto, las inversiones emitidas y recibidas —entre ellas la inversión extranjera directa— y el dinero pagado y recibido en pago desde el exterior.
Las variables personales son, entre otras, los minutos de llamadas telefónicas internacionales, la cantidad de viajes al exterior por habitante y las remesas de emigrantes como parte del producto interno bruto. Las tecnológicas incluyen el porcentaje de población con acceso a Internet.
Entre las variables políticas figuran la integración de cada país a organizaciones internacionales, su participación en misiones de mantenimiento de la paz y la cantidad de naciones en los que cuentan con embajadas.
Como en las anteriores tres ediciones, los pequeños países de Europa septentrional y occidental coparon el campo de juego, al representar 12 de los 20 primeros puestos.
Pero, por primera vez, América del Norte desplazó a Europa como región, pues Estados Unidos avanzó cuatro lugares, del puesto 11 el año pasado al siete , Canadá uno, del siete al seis, y México seis, del 51 al 45.
Las grandes caídas fueron las de Suecia (del puesto tres al 11), Marruecos (del 29 al 47), Sudáfrica (del 38 al 49), Kenia (del 44 al 54) y Egipto (del 48 al 60).
China e India, cuya población representa más de un tercio del total mundial, cayeron cuatro lugares desde el informe anterior.
Por otra parte, los grandes avances correspondieron a Filipinas (54 a 33), Argentina (50 a 34), Perú, Australia y Nueva Zelanda, que se corrieron ocho puestos cada uno hasta ocupar respectivamente los lugares 52, 13 y ocho de la tabla.
En cuanto a Asia oriental, detrás de Singapur y Malasia se ubicaron Japón (29), Corea del Sur (32), Filipinas (33), Tailandia (48) y China (57).
Taiwan ocupa el puesto 36, y su rendimiento habría sido mayor si no ocupara el último puesto mundial por su integración a organismos internacionales y fuerzas de paz y por su ratificación de tratados.
China, que considera a Taiwan una provincia renegada, ejerce presión contra el reconocimiento de la isla como nación independiente.
Panamá, en el puesto 27, fue el primero en América Latina, seguido por Argentina (34), Chile (37), México (45), Colombia (50), Perú (52), Brasil (53) y Venezuela (58).
El rendimiento latinoamericano fue mayor que en ediciones pasadas del Indice debido, en buena parte, a la depreciación de las monedas registrada en 2002, que hundió la economía regional.
Pero eso elevó la participación del comercio y las inversiones como proporción del producto interno bruto, al menos en dólares, lo cual mejoró su posición en el Indice.
***** +Revista Foreing Policy, en inglés (http://www.foreignpolicy.com/)
(FIN/IPS/traen-mj/jl/gb if/04)