La crisis financiera que afecta a la empresa transnacional de lácteos de origen italiano Parmalat, a causa del desfalco de unos 18.000 millones de dólares, comenzó a hacer estragos en las fábricas de su filial brasileña. La unidad productora de Itaperuna, en el sudoriental estado de Río Grande y una de las más importantes del país, dejó de producir varios de sus principales alimentos, como galletas y jugos, por falta de leche, otras material primas y combustible para sus máquinas ante la falta de pagos.