Las autoridades paraguayas sospechan que el arma de artillería pesada secuestrada de la camioneta del teniente coronel Enrique Sarubbi Flores el viernes pasado pude ser parte de un complot para asesinar al propio presidente Nicanor Duarte Frutos. El comando conjunto de la policía y el ejército no creen que el arma fuera robada para ser vendida a un grupo mafioso ligado al narcotráfico. En 1999 fue acribillado a balazos en Asunción el entonces vicepresidente Luis María Argaña, en una acción a la que se le atribuye autoría intelectual al ex general Lino Oviedo, refugiado en Brasil.