El cierre de mercados para la carne bovina de Estados Unidos por la aparición de un caso del mal de las vacas locas aún no beneficia a la producción argentina, pues fuertes compradores como México, Japón y Corea del Sur no estudian importar ese producto de Argentina porque aún cuenta con el carácter de país libre de aftosa pero con vacunación. Esos mercados pueden ser aprovechados ahora por Australia, Nueva Zelanda y, en menor proporción, por Uruguay y Brasil, señala un informe de expertos al respecto.